Los paseos en pareja pueden ser bastante divertidos y emocionantes; por más que te dirijas a un lugar que ya conoces, nunca se sabe con qué sorpresas te puedes encontrar en el camino.
Y exactamente de eso se trata la historia que conoceremos a continuación. Łukasz Muniowski y su esposa, Natalia, salieron a dar un divertido paseo en pareja en Polonia durante el 2015; todo parecía ir bien como de costumbre, pero las cosas cambiaron cuando a la distancia vieron algo que se asomaba de una zanja.
Cuando se detuvieron para poder ver de qué se trataba, lograron notar que era la cabecita de un perrito que los miraba desde el interior de un hoyo, de inmediato se dieron cuenta de que el cachorro necesitaba ayuda.
Ambos decidieron acercarse al perrito para ayudarlo a salir, pero el cachorro asustado corrió despavorido lejos de ellos al interior de una alcantarilla; y mientras estaba corriendo, la pareja advirtió algo muy particular en su manera de correr, les resultó algo divertido al principio, pero luego notaron que no podía tratarse de nada bueno.
Según palabras del mismo Muniowski, el cachorro corría con la espalda muy arqueada y sus patas parecían no tocar el suelo, definitivamente algo iba mal con este pequeño amiguito, por lo que debían sacarlo de donde estaba para que recibiera atención médica.
Al principio fue difícil para la pareja acercarse al perro, porque se mostraba bastante temeroso y desconfiado, pero poco a poco pudieron demostrarle que estaban ahí para ayudarlo; así, poco a poco, empezó a sentirse mejor y a salvo.
Ambos tomaron al cachorro en brazos y decidieron llamarlo Bobby, lo llevaron rápidamente al veterinario para que le proporcionara atención médica, ya que solo de esta manera sabrían por qué razón caminaba tan raro.
La pareja describió cómo una de las patitas de Bobby parecía estar pendiendo de un hilo, además el perrito demostraba mucho dolor con su patita.
Según los consejos médicos, el cachorro debía ser sacrificado, pues tenía heridas en su pierna que ya tenían al menos 3 semanas, aparentemente estas heridas fueron causadas por alguna trampa o tal vez fue atropellado por un auto.
Pero esta pareja no podía permitir esto, ellos decidieron adoptar a Bobby de inmediato y llevarlo con ellos a casa; debido a la condición de su piernita, esta se le fue amputada, pero eso no detuvo a esta amorosa pareja de brindarle al cachorro todo su amor.
Bobby fue equipado con un aparato ortopédico para facilitar su movilidad, ya que le faltaba una patita. Eso hizo las cosas bastante difíciles para él al principio, incluso sus amorosos dueños creían que tal vez al perro le sería imposible volver a correr.
Pero las cosas salieron perfectamente para el encantador Bobby, pues una noche repentinamente, mientras sus padres lo llevaron de paseo simplemente empezó a correr, ¡ellos no lo podían creer!
Ahora es súper ágil, sus dueños cuentan cómo sube y baja las escaleras a toda velocidad. Es un perro increíble.
Todos merecemos una segunda oportunidad y este cachorro es la demostración de ello. ¡No olvides compartir su historia!