Unas mujeres dieron una alerta a la asociación Hope For Paws, para que rescataran a un perro que había sido abandonado en el desierto de California.
Pero este no fue un rescate cualquiera, porque esta perrita, ahora llamada «Venus» se negaba a ser atrapada por sus rescatistas y esto se debe a que tenía mucho miedo de que le hicieran daño.
Durante más de 5 meses la gente que veía a Venus trataban de ayudarla alimentándola, pero nada de esto funcionaba, Venus no lograba confiar en nadie.
Lo más preocupante es que las temperaturas estaban alcanzando los 41 grados centígrados y Venus tenía un pelaje muy grueso y largo.
Con las temperaturas insanas y Venus corriendo peligrosamente cerca de una carretera con mucho tráfico, se estaban quedando sin opciones, y tiempo.
Como último recurso, desde Hope for Paws acudieron a un profesional veterinario para tranquilizar a Venus y así ponerla a salvo. Consiguieron una unidad veterinaria móvil para que tuvieran todos los recursos para cuidarla lo antes posible.
Tan pronto como Venus recibió un disparo con el tranquilizante, sus rescatistas corrieron a ayudarla. Venus estaba aterrorizada, pero finalmente pudo ser sacada del desierto, donde no hubiera sobrevivido mucho tiempo sin comida y a esas altas temperaturas.
El problema no acabó aquí, sino que cuando Venus despertó seguía intranquila, ella corría por la habitación y saltaba sobre todo, tratando de orientarse, incluso trató de saltar por la ventana cerrada un par de ocasiones.
Se trataba de un caso difícil con traumas fuertes, pero Eldad Hagar, fundador de Hope for Paws decidió dedicarle más tiempo a Venus y ganarse su confianza. Entendía que ella estaba muy confundida y solo necesitaba paciencia y compañía.
Se requirió mucho tiempo para que Venus lograra confiar en las personas nuevamente, pero la constancia y el trabajo duro del personal ayudó en todo momento para su recuperación.
«Ella estaba tranquila y dejaba que la gente la acariciara. Simplemente sabía que estábamos allí para ayudarla a pesar de que todavía era resistente«, dijo Hope for Paws. «Le decíamos que todo iba a estar bien y que nunca más tendría que sufrir».
Una vez que Venus aceptó a otras personas, un veterinario revisó todos sus signos vitales, y pronto fue colocada en un hogar adoptivo amoroso a través del Rescate del Pastor Alemán Costero.
Ella ahora está prosperando en su hogar de crianza con otros dos pastores alemanes, pero todavía está buscando su hogar para siempre.
Hope for Paws / Inside Edition
«Es el tipo de perro que será realmente leal a su dueño y solo tiene ojos para ti».
La transformación de Venus es increíble, de pasar a estar sucia y en malas condiciones a estar muy bien alimentada y limpia. Cada animal merece la oportunidad de sentirse seguro y protegido.
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