La bondad viene en todos los tamaños, formas y colores. En este caso, se ha materializado en la forma de una bondadosa y amorosa gata que ha decidido adoptar a ocho adorables erizos bebé. Habían perdido a su madre en un trágico accidente con una podadora de césped, dejando a los pequeños indefensos y sin nadie que se encargara de ellos.
Musya es el nombre la caritativa gatita que fue asignada a cuidar de los erizos huérfanos después de que perdieran a su madre en el accidente trágico.
Los cuidadores del zoológico de Sadgorod en Vladivostok, Rusia, se dedicaron a cuidar de los pequeños pero estos se negaban a comer de la jeringa o incluso de la botella que se les proporcionaba.
Preocupados de que los erizos no fueran capaces de sobrevivir debido a una mala alimentación y falta del cariño que solo una madre puede proporcionar, ellos acudieron a Musya, quien apenas había acabado de cuidar a un gatito que también había quedado huérfano, por lo que aún permanecía en estado de lactancia.
Con el fin de determinar si Musya aceptaba a los inusuales bebés, estos fueron colocados cerca de ella y en tan solo segundos la gata se recostó de lado animando a los pequeños a que se alimentaran de ella, cosa que los erizos no tardaron en hacer. Por su parte, los aliviados cuidadores se aseguraron de que la nueva madre y sus hijos adoptivos tuvieran todas las comodidades que pudieran necesitar para estar a gusto.
Resulta impresionante cómo el cariño de los animales no conoce límites, permitiéndoles cuidar y alimentar a crías que ni siquiera son de su misma especie, algo absolutamente tierno de lo que todos podemos aprender.
Los cuidadores del zoológico no tardaron en grabar a la recién formada familia para así poder compartir su inspiradora y tierna historia con las redes sociales, así todo el mundo puede conocer la historia de Musya y sus ocho inusuales hijos, los cuales en cuestión de días se han convertido en una adorable y encantadora familia.
El amor de una madre es algo que verdaderamente no se puede reemplazar, y esto es algo que la adorable Musya ha demostrado al adoptar a tan adorables y poco convencionales bebés, quienes solo buscaban algo de cariño y comprensión materna.
Lo que ellos realmente querían desde el principio no solo era un ser que les pudiera proporcionar una fuente de alimento confiable y apetitoso, que seguro los convertiría en fuertes y hermosos erizos en un futuro muy cercano, sino también un ser que les pudiera brindar todo el amor de madre que ellos necesitaban.
Comparte con tus amigos esta tierna y adorable historia.