Definitivamente, el cariño por nuestros peludos se demuestra de muchas formas, el amor por ellos es algo más que una caricia, hacen despertar la creatividad cuando sabemos escuchar sus necesidades para complacerlos, al igual que lo hacen con nosotros para alegrarnos la vida.
Una expresión de ese afecto quedó demostrado en esta historia, el protagonista es un encantador perrito que buscando obtener la mejor vista para poder vigilar, le dio un buen susto a su familia.
Para que siguiera siendo feliz, le construyeron un inusual pero llamativo puesto de observación, de esta forma siente que está cumpliendo con su deber sin que su vida corra peligro y hace una de las cosas que más le agrada: tener todo bajo control viendo lo que pasa dentro y fuera de la casa para cerciorarse que todo está bien.
Resulta que este perrito llamado Check, se mudó hace poco con su familia a una nueva casa en Hawai, tiene un gran patio en el piso superior adyacente al tejado, ideal para relajarse y disfrutar del paisaje. Para Check había un problema que interfería en sus funciones como canino protector, la única opción que tenía era ir a la terraza, pero no era capaz de ver por encima del muro que lo rodeaba, era demasiado alto para él, se arriesgó hasta encontrar una alternativa.
“Era el primer día que habían dejado a su perro solo en casa, los vecinos tuvieron que hacer una llamada inesperada a los bomberos porque Check se había aventurado a pasar hasta el techo para obtener una mejor vista y saber dónde habíamos ido”, contó Nicolás Sharrock, dueño de Check.
La familia quedó consternada, el papá de Nicolás tuvo que correr de regreso a casa para poner a salvo a Check y después de bloquear el camino de acceso al tejado, en lugar de reprenderlo por querer vigilar, se le ocurrió una genial idea.
Se puso a trabajar en un proyecto para mantener feliz a Check
En su antigua vivienda, Check podía ver tranquilamente a su familia desde la ventana, hasta ese momento Nicolás no se había dado cuenta que esto podía pasar.
Este buen chico tenía las mejores intenciones, con su instinto protector quería mantener un ojo puesto alrededor del vecindario y saber hacia dónde se dirige su familia o cuando está de regreso.
“Simplemente no soportaba no saber a dónde nos dirigimos”, dijo Nicolás.
Su familia no dejó de notar su buen trabajo y decidieron solucionarlo.
Le construimos su puesto de vigilancia para que pueda vernos partir y regresar a casa. Allí también puede pasar el rato durante el día, comentó Nicolás. Su novia compartió las adorables fotos en twitter.
El puesto está hecho con madera y algunas vallas, tiene su propio techo y está protegido con cerca metálica para evitar cualquier contratiempo, además puede subir y bajar por la rampa. ¡A Check le encantó!
Este pequeño observador canino le gusta creer que es del tipo de perro guardián, comentó Nicolás. Pasa todo el tiempo por el mirador, incluso si está con la familia o solo por pasar el rato.
“Lo que inventó mi padre es muy bueno, estoy realmente sorprendido porque lo utiliza mucho”, dijo Nicolás.
Es justo lo que necesitaba. Gracias a la obra del padre de Nicolás, Check vuelve a hacer lo que mejor sabe: puede asegurarse a donde se dirige su familia, desde lo alto puede echar un ojo al vecindario y estar alerta a los extraños que pasen por ahí sin que nada se interponga, este perrito está agradecido y ama su torre de vigilancia.
La torre de vigilancia fue la solución perfecta para el nuevo hogar de Check. Si bien todos los peludos son una excelente compañía, vale complacerlos cuando entendemos sus necesidades. Estos detalles son los que nos hacen saber todo lo que valen como miembro de nuestra familia.
Comparte con tus amistades esta singular historia.