De grandes transformaciones está llena la vida, a veces parece que todo está perdido y en cuestión de minutos todo cambia. A veces, por esfuerzo propio; a veces, por un golpe de suerte, pero siempre gracias a personas dispuestas a ayudar o hacer el bien a quienes puedan encontrarse en situaciones desesperadas.
Así fue como cambió repentinamente la vida de Kelsey.
Ella es una perrita muy hermosa y de gran corazón, pero estaba viviendo las más terribles penurias y solo había conocido el lado duro y oscuro de las calles y la humanidad. Aún no estaba dispuesta a rendirse, cuando una increíble familia la encontró deambulando por un puente.
Kelsey debió haber sufrido mucho a lo largo de su vida.
Sin embargo, no había perdido la esperanza de que algo bueno le pasara y así fue: no lo dudó ni un minuto cuando sus rescatadores la invitaron a subir al automóvil, confiando completamente en que todo podía ser mejor.
Con ojos cansados pero con esperanza miraba a los humanos más bondadosos que había conocido.
Y la verdad es que a pesar de todo lo que había sufrido, era muy dócil y cariñosa, un ejemplo de que pase lo que pase siempre tenemos razones para brindar amor a quienes con amor nos traten.
Su piel estaba gravemente herida.
Su pelaje había desaparecido casi por completo, tenía sarna y quemaduras por el sol.
Fue llevada al veterinario donde se enamoraron de ella e hicieron todo lo necesario para comenzar a hacer su vida mejor. Le iban a administrar un tratamiento que pronto haría que su piel sanara y con mucho cariño para mantener siempre su ánimo.
Se puede ver lo frágil y pequeña que es en los brazos del médico.
Y su tierna carita hacia todos los que quisieran ayudar.
Poco tiempo después se notaba la mejoría, su piel estaba mucho más fuerte y sana, podía disfrutar de la sombra y de dormir en la hierba fresca, podía jugar y relajarse, su vida ya no consistía en la búsqueda interminable de agua y comida.
Su sonrisa nos dice lo agradecida que estaba.
Ella también aprendió rápidamente lo que era interactuar con otros humanos, de verdad su corazón es muy grande y parece haber olvidado o dejado atrás todo el tiempo que vivió sola y sin hogar.
Hacer amigos caninos, tampoco fue un problema para ella.
A medida que su piel sanaba, su espíritu y personalidad se hacían más notables y antes de que todos se dieran cuenta era una Kelsey completamente nueva, saludable con un hermoso pelaje suave y blanco.
Amante de una siesta en una cama tibia y suave.
Ahora tiene sus comidas regulares, baños frescos, amigos y gente que realmente la quiere, su historia es realmente conmovedora e inspiradora, gracias a la ayuda de buenas personas tenemos a una Kelsey completamente nueva y sana.
Parece mentira que esta sea la misma Kelsey que una vez vimos caminando en un puente.
Ella conoció el lado bueno de las personas.
Una transformación increíble, Kelsey estaba tan débil y enferma que posiblemente hubiese muerto en pocos días sin los héroes que cambiaron su vida, ahora es una perrita llena de vida, que conoció el amor, el bienestar y la comodidades, un aplauso a todas las personas que lo hicieron posible.
Comparte esta maravillosa historia e inspira a muchas personas para que actúen de la misma manera.