Hoy se cumple un año de la muerte de Harambe, un gorila de 17 años de edad que fue asesinado a tiros en el zoológico de Cincinnati, en Estados Unidos porque los cuidadores del parque protegieron a un niño de tres años de edad.
La muerte del gorila causó conmoción en todo el mundo, muchos usuarios de las redes sociales, el parque zoológico recibió una ola de rechazo de personas que manifestaban que el lugar no contaba con las normas de seguridad adecuadas para proteger la integridad de los visitantes ni de los animales.
El menor pudo trepar una cerca y cayó hasta el recinto del gorila donde este lo sostuvo por un momento y el personal de seguridad decidió dispararle para resguardar la vida del niño de tres años.
Algunas personas juzgaron la actuación de los padres del niño alegando que fueron irresponsables en el cuidado del pequeño ante los riesgos que había en el lugar.
Sin mencionar que ningún animal merece estar privado de su libertad, en un lugar donde no pueda desarrollarse en las condiciones de su hábitat natural. Ellos no nacieron para ofrecer espectáculos ni para ser utilizados para que la industria del entretenimiento obtenga beneficios económicos a costa de su sufrimiento.
Meses después de la muerte de Harambe el zoológico cerró su cuenta de Twitter. El gorila asesinado pertenecía a una especie en grave peligro de extinción.
Un medio de comunicación relató una entrevista de un especialista en el lenguaje de los animales, y comentó que “Yo solía ser un director de escena de teatro durante 15 años y estudié mucho acerca de escuchar y saber interpretar los sonidos del lenguaje”.
“He podido aprender a escuchar la energía electromagnética que se traduce en formas de pensamiento, la comunicación animal es un lenguaje universal no verbal, comentó Horsley, quien aseguró tratar de establecer una conexión con el gorila Harambe después de su muerte.
Comentó que Harambe se sintió amenazado, asustado, y actúo de forma protectora y defensiva durante el incidente. Se sintió confundido, desconcertado.
“Siento inmensa tristeza cuando veo el mundo que dejé atrás, deseo una vida diferente, compasiva, honorable, amable. ¿Cuándo los seres humanos comenzarán a amarse de nuevo?”, comentó Horsley.
“Aquí estoy ahora en paz, deseo traer más paz con mi mensaje”, fue una de las frases que el intérprete pudo captar.
A un año de la muerte de Harambe muchos condenan lo ocurrido, y le rinden homenaje para conmemorarlo manifestando una expresión de apoyo a las especies de nuestro planeta.
Ha causado mucha indignación para los amantes de los animales que el zoológico de Cincinnati no le han rendido un homenaje público. Pero eso no fue impedimento para que muchas personas fueran hasta la estatua de Harambe que se encuentra frente a la exhibición de gorilas del zoológico para llevarle flores y mensajes de cariño.
Una usuaria de Twitter escribió:»Los recuerdos de Harambe pueden estar muertos, pero viven siempre a través de las sombras».
Daily Mail
No es justo que los animales tengan que sacrificar su libertad, incluso su vida para satisfacer la necesidades de algunas personas que no saben reconocer el valor que merecen los seres vivos.
Tenemos que seguir alzando la voz, la muerte de Harambe se ha convertido en símbolo de la lucha por la defensa de los derechos de los animales. ¡Compártelo!