Cuando se trata de animales rescatados, sabemos que requieren de mucho amor y paciencia para que ellos logren salir adelante y vuelvan a confiar en las personas. Pero hay animales que requieren un poco más de ayuda y un juguete de su vida pasada puede ser la diferencia para su recuperación.
El nombre de este perrito es Smokey, fue entregado a un refugio porque sus dueños perdieron su casa y ya no podían cuidar de él, al principio estaba muy triste, pero su elefante y mejor amigo no lo abandonó nunca, no lo suelta para nada.
Tiene 5 años, fue entregado al refugio Franklin Country Dogs el día de San Valentín, junto con su gran amigo y juguete, el elefante, «para que pudiera estar tranquilo»
Smokey adora a su elefante gris con orejas rosadas, incluso en su anuncio de adopción se especificaba que debía ser adoptado junto con su amigo el elefante.
El perrito estaba muy triste, lo tomaban por tímido o estresado, pero le dieron la oportunidad de conseguir una familia.
Sin embargo le gruñía y ladraba a todos los visitantes, por lo que tuvieron que posponer su adopción.
Las cosas se pusieron peor para él, estaba programado para ser sacrificado en este mes.
Afortunadamente una asociación sin fines de lucro I Have A Dream Rescue Organization, le han dado una oportunidad. Ellos saben que cuando deje de estar asustado no gruñirá más, lo que le pasa es que solo está triste.
Los perritos son capaces de recordar el calor de un hogar, la seguridad de una familia, luego de pasar sus primeros años con las misma personas, no pueden creer cuando estas tienen que dejarlos. Se ponen muy tristes.
Apoyemos a este tipo de refugios que abren sus puertas a todos los animalitos que lo necesitan, adoptemos y no dejemos de brindar una segunda oportunidad a los peluditos.
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