Para una madre perrita, ni el dolor físico, ni la lesión más severa en su cuerpo, pueden ser comparables con el sufrimiento de que le arrebaten sus hijos para siempre.
Este padecimiento, que es entendible en las madres humanas, sucede mucho más de lo que quisiéramos, también con las perritas. Y ellas sufren igualmente la dura separación de sus cachorros.
Paralizada y llena de dolor, una madre perrita lloró devastada cuando la separaron de sus crías
¿Por qué se jugaría de ese modo tan cruel con la vida de un animal inocente? Esta es una pregunta que siempre nos hacemos en las historias de rescates de perros.
Es desconcertante cómo algunos no consideran en lo más mínimo a criaturas vivientes y sintientes como los perros, y más aún a las madres perrunas, que muchas veces aman incluso más que las madres humanas.
Al borde de la calle, indefensa y a punto de dar su último aliento
Durante días, esta valiente canina se arrastró como pudo, junto con sus bebés, en busca de un lugar seguro, con la esperanza de que alguien tuviera una pizca de compasión.
Los rescatistas de Animal Shelters, en Rostov, al oeste de Rusia, fueron alertados de un perro que apenas se movía.
Lo más desgarrador es que muchos transeúntes vieron a la madre y a los cachorros, sin que hicieran nada por ayudarla. Es más, poco a poco, la gente se iba llevando a sus bebés como si fueran premios de una piñata, pensando que la madre moriría.
La desesperada perrita, sin poder moverse por una herida de bala en su columna que la imposibilitaba por completo, no hacía más que llorar para que no fueran tan crueles y le devolvieran a sus pequeños. ¡Pero nada dio resultado!
Ella fue llevada de inmediato a una clínica veterinaria para ofrecerle la segunda oportunidad que desde hace tanto tiempo la pobre merecía.
Le dieron analgésicos y algunos antibióticos, pero tristemente la bala afectó gravemente su médula espinal y su movilidad. Los veterinarios quedaron impactados al ver que sus piernitas eran «tiesas como la rama de un árbol».
Por si fuera poco, sufría de mastitis y gusanos intestinales que la estaban martirizando.
Bautizaron a la valiente luchadora como Berry
No nos podemos imaginar el dolor y el estrés por los que atravesó Berry, no ya por sus lesiones, sino sobre todo por la manera en que le arrebataron a sus pequeños. ¿En qué corazón puede caber perpetrar semejante maldad contra una madre discapacitada?
El universo realmente estaba poniendo a prueba a esta madre y a sus héroes. Pero ellos no se darían por vencidos, tenía una mirada tan dulce, conmovedora y triste, que le prometieron que la amarían hasta el infinito y la sacarían adelante.
Pero las cosas se complicaron para Berry, su condición de salud era crítica y tuvieron que llevarla a Moscú para que fuera atendida en otro hospital. Y cuando pensaron que tendrían que decirle adiós para siempre, un cirujano obró maravillas gracias al amor y a las oraciones de todos.
Tuvieron que limpiare el pus y la gangrena de su columna, y después tuvo que pasar por quimioterapia.
Lentamente, Berry comenzó a tener ilusión de nuevo por la vida. Y poco a poco, ella avanzaba en su camino de curación, bastante largo, pero con la esperanza puesta en que lo lograrían.
Finalmente, un buen día, Berry hizo derramar lágrimas a todos en el refugio cuando de pronto pudo pararse por sí sola, a pesar de que sus patitas traseras estaban totalmente paralizadas.
Berry realmente escapó de la muerte y escribió su nueva historia gracias al amor
Después de 150 días de cuidados intensos, Berry ya es otra y hasta socializa con otros perros. Sus rescatistas planean conseguirle una silla de ruedas personalizada para que le sea más fácil moverse. Pero a ella, nada ni nadie, podrá detenerla.
Mira en el vídeo a continuación el increíble viaje de recuperación de esta valiente perrita:
«Berry se separó de sus cachorros llorando, tenía una bala en la columna vertebral y la vida era frágil, vio cómo se llevaban a sus cachorros uno por uno. Durante su tratamiento en curso, le sucedieron muchas cosas malas. Creo que Dios nos ha probado», escribieron sus rescatistas junto a las escenas con las que es difícil no emocionarse.
¡El mundo necesita más héroes así! Que la historia de Berry sirva para crear conciencia, ninguna madre merece sufrir de esa manera.