Un distinguido perro K-9 perdió la vida y sus compañeros de escuadrón no pueden controlar las lágrimas en el acto fúnebre que hicieron para despedirlo.
Los perros oficiales lamentablemente están expuestos a un triste desenlace, como cualquier otro responsable de mantener el orden en la ciudad y este fue el caso de Fargo.
El perrito tenía casi los 6 años y una larga vida por delante.
El can en cuestión era belga Malinois que se desempeñó como K-9 desde que tenía solo 9 meses de vida.
Desde entonces Fargo pasó por los debidos entrenamientos, pero además afianzó sus lazos con el diputado Warren Cavanagh quien en vida fue su compañero de patrullaje.
Durante este tiempo el perro aprendió incluso a adelantarse a las decisiones de Cavanagh.
Fargo sabía qué hacer incluso antes de que el uniformado le diera alguna orden, pero la vida de estos compañeros no era solo trabajo.
Cavanagh describe al perro como un ser luminoso que se encargó de alegrar siempre sus días. De hecho, el K-9 vivía con ellos en casa.
El oficial, su pareja y su hija de 8 años sienten ahora la ausencia del peludo y por eso no pudieron contener las lágrimas durante su funeral.
Lamentablemente, Fargo perdió la vida durante un atraco. El sospechoso de 21 años descargó su irá contra uno de los seres más queridos en la comandancia de Richland en Washington, Estados Unidos.
En el momento, el oficial no pensó que el perro había sido herido hasta que lo vio tirado en el suelo. De inmediato, le dieron primeros auxilios, pero Fargo falleció camino a la clínica veterinaria.
Su partida ha sido un golpe duro para todos pero sobre todo para su compañero, quien aún se resiste a no verlo más.
“No dije adiós, porque decir adiós significa que nunca lo volverás a ver. Así que le dije: ‘Te veré luego, amigo”, declaró Cavanagh.
Perder a un oficial en cumplimiento de su deber es sin duda una pena bastante dolorosa y más cuando se trata de un K-9 como Fargo. Este perro no decidió ponerse un uniforme pero entregó su vida para mantener el orden en la ciudad y por eso su partida rompe el corazón.
Falleció como un héroe, cumpliendo con su compromiso de proteger a los ciudadanos y luchar contra las injusticias.
Leon Lott, otro alguacil que ha estado en el departamento de policía por 37 años, declaró que esa era la primera vez que la partida de un K-9 lo conmocionaba tanto. Fargo era un perro muy especial para ellos.
Es el primer can que conoce y pierde la vida en cumplimiento de su deber.
Desde la partida del perrito, el Departamento recibió diferentes donativos de niños que con el corazón destruido enviaron sus ahorros para mejorar la seguridad del equipo de K-9. Para ellos la pérdida de Fargo también fue significativa.
Por eso, no es de extrañar que la despedida del perro estuviese embargada de lágrimas; fue un momento emotivo para todos.
Los oficiales rindieron honores a su compañero caído en nombre de la justicia y recordaron todos los que compartieron con el can durante estos años de carrera.
Fargo no es el primer y lamentablemente tampoco el último can que pierde su vida, mientras intenta atrapar a los chicos malos. Al igual que él hay muchos caninos fallecidos en circunstancias parecidas y un ejemplo es el caso de Harlej, un perro K-9 que se sacrificó por sus compañeros.
El oficial Jarred Koopman y el querido Harlej.
Incluso en los momentos de mayor terror y peligro, los canes deciden no apartarse de sus seres amados y dan todo por ellos.
Fargo amaba a su compañero y entrenador y nunca lo dejó solo durante ninguna situación intimidante. Lastimosamente su entrenamiento y valentía no sirvieron de escudo contra su atacante.
Estos peludos son unos héroes y lo menos que se merecen es ser recordados por siempre. Vuela alto, Fargo.