Cuando Mary y sus tres hijas se mudaron a Ankara, Turquía, debido al trabajo de su esposo, decidieron que querían aportar algo positivo a su nueva comunidad. Al poco tiempo encontraron un refugio local donde podían ser voluntarias, pero nunca imaginaron lo que esta decisión aportaría a sus vidas. Dicho refugio alberga a más de 4,000 perros, lo que no permitía a su personal darse abasto y mantener en buenas condiciones a todos los caninos, por lo que lamentablemente algunos sufrían desnutrición.
Esta es una historia que demuestra que el amor hace milagros 😀
La cantidad de caninos en el albergue es tal que las jaulas individuales albergan hasta 20 perros o más. Mary incluso donó múltiples bolsas de alimento que lamentablemente solo sirvieron para alimentar a algunos cuantos perritos.
La situación era muy triste y frustrante para la familia de Mary, sin embargo nunca dejaron de ayudar ni perdieron la fe.
Mientras la familia realizaba el voluntariado, encontraron a una camada de 4 cachorros que estaban muriendo de moquillo, una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta el cerebro y la médula espinal y puede causar pérdida de la coordinación y múltiples convulsiones. Los pobres cachorros estaban muy débiles y enfermos, y permanecían en una jaula llena sin ningún cuidado especial debido a los pocos recursos con los que se contaba. Lo único que el refugio podía ofrecerles era un lugar en donde descansar hasta sus últimos días.
La vida les tenía preparada una maravillosa sorpresa a Mary y su familia
La familia decidió llevar a los cuatro perritos a casa. Lamentablemente 3 murieron a los pocos días de haber llegado. La única sobreviviente fue Faith (Fe en español), haciéndole honor a su nombre y sorprendiendo a todos.
“Pensé que la traeríamos a casa a descansar en paz, pero estábamos equivocados”, dijo Mary.
De acuerdo con algunos expertos, el 80% de los perros no sobreviven a las etapas finales de una enfermedad, pero Faith fue una excepción.
«Cada día que pasaba yo sólo podía ver que ella salía adelante» expresó su orgullosa «mamá»
Faith se ha recuperado casi por completo y ha sido adoptada por Mary y su hermosa familia 🙂
A pesar de su gran triunfo, desafortunadamente Faith sigue enfrentando algunos problemas por las condiciones en las que vivió en el refugio. De vez en cuando se muestra ansiosa a la hora de comer ya que no sabe si tendrá alimento todos los días, además de que no cuenta con todos sus dientes como resultado de la mala alimentación.
Pese a todos los pequeños obstáculos a los que se ha enfrentado, Faith es una perrita muy feliz
Gracias al amor y constancia de Mary y su familia, Faith ahora se encuentra en un lugar donde no tendrá que preocuparse de recibir atención, amor y mucho menos comida. Te invitamos a conocer su conmovedora historia en el siguiente video:
¡No olvides compartir esta dulce historia y recuerda ser generoso con todo aquel que lo necesite, es algo maravilloso! 😀