Para un cachorrito pitbull que sufrió lo indecible, siendo usado vilmente en las conocidas peleas de perros, nada pudo ir peor cuando vio que lo estaban separando de su amado hermano canino para siempre.
Ambos perritos, que siempre debieron estar en un hogar junto a dueños amorosos, llevaban en su espalda, a su corta edad, un pasado lleno de malos tratos.
Por suerte, una organización de rescate local en Estados Unidos, se enteró de su lamentable situación. Y con ayuda de las autoridades, lograron sacarlos de ese drama. Difundieron su historia para tocar el corazón de alguien y conseguir un hogar para los dos.
Fue en el año 2016 cuando una mujer llamada Tawny, y su esposo, conocieron finalmente a los hermanitos Keiko y Niko en un evento de adopción, y se enamoraron perdidamente de los 2 cachorritos.
Por supuesto que su plan inicial era adoptar a ambos, pero lamentablemente su ciudad tenía una ley estricta e inviolable: sólo se permitían tres perros por hogar.
Para ese entonces, Tawny ya tenía otros dos perros adoptados. Así que en el rescate decidieron que era preferible dar en adopción a un perro, antes que a ninguno, y le asignaron a Keiko.
El pobre pitbull vio con profunda tristeza cómo su hermano era adoptado y él no
Tawny realmente estaba con el corazón encogido cuando al llegar a recoger a Keiko, los trabajadores le contaron la reacción del pobre Niko. ¡Estaba devastado!
Parece que había entendido que por alguna razón se habían enamorado de su hermano, pero él no les gustaba demasiado…
¿Quién podría explicarle que todo era por una ley absurda pero él era un cachorrito tan digno como su hermano de un hogar lleno de amor?
Tawny tuvo que resignarse a llevarse sólo a Keiko y empezar su nueva vida, junto a sus tres perros en casa.
Tiempo después, Niko fue adoptado por otra familia. Pero nadie imaginaba que ese no era para nada el destino correcto, y que seguiría siendo víctima de malos tratos.
Por coincidencias del destino, por el mismo tiempo, Tawny tuvo que despedirse para siempre de su perro mayor. Después de toda una vida juntos, y de ser el perro más feliz, cruzó el arcoíris.
Enseguida, ella vio en las redes una foto de Niko con un mensaje urgente, que decía:
«La familia que adoptó a Niko no lo trató bien. El rescate instó a que lo trajeran de vuelta y aquí está con nosotros de nuevo. Su corazón está roto en mil pedazos. Ahora necesita un nuevo hogar».
Tawny y su esposo no dudaron un segundo en acercarse al refugio. Sabiendo que ahora eran una familia sólo con dos perros, supieron que Niko les pertenecía. En el refugio no podían estar más felices por eso y se lo asignaron enseguida.
Sin embargo, cuando Tawny se lo llevó a casa, no podía hacerse una idea de lo traumatizado que estaba.
“Si intentáramos pasar por encima de él, se estremecería. Si tratábamos de ponerle una correa, ahí mismo se orinaba», contó Tawny.
El pobre Niko necesitaba sentirse seguro y amado con urgencia
Por suerte, Keiko estaría allí para actuar como el mejor hermano. La primera vez en que se vieron en su nuevo hogar fue realmente emocionante.
Por supuesto que ambos se recordaban y de inmediato desarrollaron un vínculo insondable, de esos que sólo se dan entre los hermanos.
Nada era fácil para Niko. Su primera noche fue bastante aterradora. Aunque sus padres hicieron de todo para que se sintiera cómodo e intentaron consolarlo, no estaba funcionando.
Pero, Keiko lo sabía mejor. Se metió dentro de la caja de su hermano, lo abrazó y se acurrucaron juntos. Fue el truco perfecto y desde entonces, Niko pudo conciliar el sueño. ¿No es esto absolutamente hermoso?
Esta historia es verdaderamente conmovedora y sigue en el vídeo a continuación. ¡Tienes que ver lo que pasa después!:
El pobre Niko estaba tan traumatizado y continuó luchando contra sus emociones, pero sorprendentemente, su hermano supo exactamente qué hacer para cambiar su vida y reparar su corazón roto. ¡Imposible no llorar!