Para cualquier dueño medianamente responsable la pérdida de su mascota es una noticia dolorosa. Tan dolorosa como si perdiera a un miembro de su familia, pues al final del día se supone que los peludos pasan a formar parte del grupo familiar.
Esta lamentable experiencia la ha sufrido en carne propia una mujer en Michigan (Estados Unidos), que por más de siete años buscó con desespero a su compañera canina.
Su nombre es Laurie Davies y su historia de perseverancia les ha dado un suspiro a todos.
La perrita de Laurie, llamada Pepper, tenía solo seis añitos cuando se extravió a mediados del 2014. Y, aunque ha pasado más tiempo que la propia edad del animalito, la mujer no dejó de buscarla con desespero.
La chica pensó que en algún momento volvería a su lado y no se equivocó.
Laurie no solo difundió la foto de Pepper en internet con la esperanza de hallarla, sino que acudió al departamento de policía para dar parte a las autoridades sobre el presunto robo de su mascota.
Pese a que los oficiales estaban al tanto, durante mucho tiempo no se supo nada de Pepper.
Laurie se negaba a bajar los brazos pero su búsqueda parecía eterna, era como si a la perrita se la hubiese tragado la tierra. Pero ante el pesimismo, siempre prevaleció el entusiasmo y la fe de Laurie, unas virtudes que parecen haber dado resultados.
Ella no perdió la esperanza y ha vuelto a abrazar a su perrita.
Por cuestiones del destino, esta mujer recibió la llamada que siempre había estado esperando: Pepper había aparecido. La peluda que dejó de ver cuando tenía solo seis años, ahora es una ancianita de 13 pero los milagros ocurren hasta en el último momento.
Pepper fue localizada gracias a su microchip.
El refugio Eaton County Animal Control de Michigan, tenía a la peluda bajo su cargo y fueron ellos quienes contactaron a Laurie. Sin embargo, esta perrita vivió muchos años en otro hogar.
“Había estado viviendo con una familia durante los últimos 5 años que desconocía su microchip y el estado de robo. Estamos agradecidos por la comprensión de ellos para que Pepper se reuniera con su familia original“, escribieron en la página de Facebook del refugio.
Este reencuentro es realmente milagroso, puede que a Pepper no le queden muchos añitos de vida. Pero no hay que desanimarse porque, al menos en su ocaso, la perrita podrá compartir hasta el final con la familia que la amó desde cachorrita.
Laurie no está dispuesta a dejarla sola nunca más.
La historia ha conmovido a todos en Michigan y por eso las autoridades recuerdan la importancia de uso de microchip en mascotas. Sin este dispositivo la posibilidad del reencuentro hubiese sido casi nula pero. Ahora Pepper vuelve a abrazar a su mamita y le espera un futuro feliz.
No dejes nada a la suerte, asegura a tus mascotas con un microchip. Comparte esta hermosa historia y que la experiencia de Laurie sirva de aprendizaje para todos.