Son muchos los perritos callejeros que pasan sus días ocultándose en refugios improvisados, estos a pesar de no estar en las mejores condiciones se convierten en el mejor lugar de perritos enfermos y vulnerables que sin saber a dónde ir se resignan a una vida de miseria y dolor.
Por suerte, muchos logran recibir ayuda y empezar una lenta pero satisfactoria transformación que terminará por cambiar su vida.
El perrito vivía bajo un refugio lleno de escombros y suciedad.
Esta es la historia de Lamyai, un perrito que vivía en un refugio sucio y húmedo que logró un final feliz gracias a los rescatistas de AnimalSTEP Official.
El equipo de voluntarios llegó al lugar tras recibir una llamada en la que les indicaron que había un perrito abandonado, bajo los restos de lo que parecía una choza en el que apenas se le podía ver la cabeza.
Se trataba de un cachorro mestizo con algo de poodle.
Cuando los rescatistas llegaron al lugar se toparon con una de las escenas más tristes que hayan presenciado, efectivamente había un perrito abandonado que en primer momento solo dejó ver su cabeza del escondite.
Los rescatistas intentaron varias técnicas para motivarlo a salir, pero el perrito no parecía confiar en los humanos, incluso recurrieron a la estrategia más vieja de todas: ofrecerle comida, pero cualquier intento era en vano.
Tenía una grave infección en la piel que afectaba la mitad de su cuerpo.
Después de muchos intentos Lamyai se animó a salir, pero solo olió la comida, su desconfianza podía más que su hambre. Al menos, habían logrado sacarlo del refugio, por lo que los rescatistas optaron por dejarle comida a una distancia que pudiera alcanzar y lo motivara a continuar a la siguiente estación de alimento.
Tras repetir este proceso por horas, lograron convencer al perrito de que estaba en buenas en manos.
Gracias a la paciencia el amor infinito de sus rescatistas sigue recuperándose.
Su actitud desconfiada había cambiado, pero aún quedaba mucho trabajo por hacer. Su estado era deplorable, los rescatistas rápidamente se dieron cuenta que sufría de una grave infección en la piel, necesitaba atención veterinaria de inmediato. Afortunadamente, la ayuda había llegado.
Lamyai cedió ante los encantos de su rescatistas y fue trasladado a la clínica donde lo tuvieron en cuidados intensivos por un par de días.
Actualmente sigue recuperándose satisfactoriamente, solo es cuestión de tiempo para que esté completamente sano y sea puesto es adopción.
Este hermoso perrito ha luchado toda su vida y no se dará por vencido. Ojalá pronto pueda disfrutar de una nueva vida rodeada de amor. Comparte y no dudes en brindarle una mano amiga a un perrito vulnerable.