Hay quienes dicen que los gatitos no son cariñosos ni se consideran un miembro más de la familia. Una linda minina llamada Panda es una prueba de que nada está más lejos de la realidad.
Esta peludita fue rescatada de las calles y siempre se mostró muy agradecida con su dueña, Liel Ainmar.
Sin embargo, una vez que Liel quedó embarazada la gatita no tardó en comprenderlo y decidió dar una pequeña demostración de lo feliz que se sentía por su nuevo hermanito humano.
“Se puede ver claramente que ella lo adoró desde el principio. Es la mejor gatita”, celebró Liel.
A medida que crecía la barriga de Liel, la gatita pasaba más y más horas ronroneando junto a la futura madre. Evidentemente, le gustaba estar muy cerquita del bebé y comprendía a la perfección que pronto llegaría un nuevo miembro a la familia.
“Así era mi gatita. Maullaba por toda la casa para avisarme que mi bebé se había despertado. Se querían muchísimo”, comentó una internauta.
La peludita dejó relucir sus instintos protectores y se negó a separarse de su dueña. Quería estar con ella en todo momento y siempre abrazaba su barriga con toda la delicadeza del mundo.
“Una vez quedé embarazada, ella comenzó a seguirme por toda la casa. Le gustaba inclinar la cabeza sobre mi vientre y ronronear”, explicó Liel.
Meses después, nació el bebé y la gatita no cabía en sí de felicidad. Continuó con su labor de hermanita protectora y suele pasar el día entero en el cuarto del pequeño humano.
No hay dudas de que ambos guardan una conexión especial desde meses antes de su nacimiento.
“El pequeño sabrá lo que es el verdadero amor. Felicitaciones”, dijo un usuario en las redes.
Muchos dudarían dejar a un bebé tan cerca de una mascota, pero Liel conoce muy bien a su gatita y sabe que lo único que quiere es brindar amor y asegurarse de que nada malo suceda en la casa.
“Ahora Panda salta a la cama para estar junto a él. Lo huele y se sienta cerquita”, celebró la orgullosa Liel.
El bebé recibió el nombre de Sean y ya tiene poco más de 3 meses. Sean adora tomar siestas junto a su madre y la linda Panda.
No hay duda de que con el paso de los años la gatita y él tendrán un sinfín de aventuras juntos. Nada más bonito que crecer junto a una mascota para poder aprender sobre el infinito amor de los animales.
Los animales son seres realmente inteligentes y especiales. Las mascotas ayudan a que las familias estén realmente completas con mucho amor y pelitos por doquier. ¡Comparte!