No hay nada más importante para un gatito bebé que compartir los primeros meses de vida junto a su madre. Necesitan su calor y sus cuidados para poder crecer sanos y fuertes, de lo contrario es muy probable que no logren sobrevivir.
Lamentablemente, todos los años miles gatitos bebés son rescatados en terribles condiciones de salud. Este era el caso de un pequeño al que encontraron en el lugar más impensado: una maceta.
Una mujer que se encontraba en Nueva York encontró al peludito en una maceta y comenzó a preocuparse por él. Buscó cuidadosamente por toda la zona con la esperanza de encontrar a la mamá pero fue en vano.
El peludito estaba solo y necesitaba ayuda urgentemente. La mujer lo llevó a Little Wanderers y de inmediato le consiguieron un hogar de acogida especializado.
“Lo dejaron en una maceta en la entrada de la casa de un residente de Woodhaven, Queens. Lo hemos llamado Tiny Tim y es sorprendentemente fuerte”, dijo un portavoz de Little Wanderers.
La mamá no había limpiado a su gatito, algo que hacen inmediatamente después del nacimiento. No se sabe si lo separaron de su mamá o la gatita enfrentó dificultades para regresar con él.
Lo cierto es que necesitaba estar en una incubadora por un par de días y recibir leche con un biberón. El peludito comenzó a mostrar cada vez más fuerzas.
Pasaba todo el día comiendo y se aferraba al biberón como si no quisiera soltarlo jamás. Angela Yu fue la voluntaria encargada de brindarle todos los cuidados a este hermoso bebé. Cuando pasaron unas semanas se dio cuenta de que todos se habían equivocado: en realidad era una gatita.
Decidieron simplemente seguir llamándola Tiny. Angela tuvo que pasar varias noches de insomnio y en ocasiones temía que la adorable gatita no lo lograra. Afortunadamente, todos sus esfuerzos dieron resultado y la linda Tiny fue declarada fuera de peligro.
“Tiny piensa que todo es un juguete y lo mejor es que todos quieren jugar con ella”, dijo Angela.
Pasaron los días y la gatita siguió sorprendiéndolos a todos. Aprendió a comer de un plato y comenzó a explorar todos los rincones de la casa. Fueron días muy difíciles pero todo valió la pena. Ahora se encuentra lista para conocer una familia que la adopte y le brinde muchísimo amor.
Tiny empezó su vida en una triste maceta pero será una gatita feliz y muy querida. ¡Comparte!