El aumento en la severidad de las leyes que buscan sancionar a los abusadores de animales es quizás una de las exigencias más comunes que diferentes grupos animalistas puedan hacerle a sus gobiernos.
Para nadie es un secreto que la vida de un animal no es igualmente valorada en comparación a la de un humano, pero en muchos países las sanciones para quienes infringen daño o incluso la muerte a estas criaturas es realmente absurda.
Estos actos no se deben permitir.
Frente a esta realidad, las medidas tomadas recientemente por el gobierno de Nueva Gales del Sur (Australia) son dignas de aplaudir y esperemos sean imitadas por las autoridades de diferentes partes del mundo.
Este estado pondrá mano dura a los maltratadores.
Las personas que comentan actos de crueldad animal en Nueva Gales del Sur desearán no haberlo hecho, pues enfrentarán no sólo privativa de libertad hasta por dos años, sino multas de hasta $ 44.000 o de $ 110.000 por crueldad agravada.
La medida ha sido anunciada después de que la nueva ley lograra ser aprobada por el parlamento del estado, el pasado jueves 18 de marzo.
Tras las rejas quizás tengan tiempo para reflexionar.
Según comentó el ministro de Agricultura, Adam Marshall, estas modificaciones buscarían modernizar la legislación de protección animal con castigos más severos.
«Estos cambios verán un aumento de hasta ocho veces en las sanciones financieras y el tiempo de cárcel para las larvas que lastimarían o dejarían de cuidar adecuadamente a los animales», dijo en un comunicado.
Los infractores que solían salirse con las suyas al lograr la libertad con el pago de sanciones minúsculas, ahora deberán recapacitar antes de querer enfrentar cargos por crueldad animal.
No sólo la violencia física será penalizada, sino los actos negligentes que atenten contra la vida de un animal.
El abandono es uno de ellos.
No proporcionar comida y refugio a una mascota, por ejemplo, conllevará al negligente dueño a ser sancionado con multas de hasta $ 16.500 y seis meses tras las rejas. Si el acto viene de parte de una empresa, el monto aumenta vertiginosamente pues pueden ser multados con montos de hasta $ 82.500
Quizás ahora muchos entiendan que los perros no son sistemas de alarma.
Para las corporaciones que hacen algo incorrecto y lastiman de algún modo la vida de cualquier animal, la pena podría ir desde los $ 220.000 y $ 550.000 por cada acto.
Con semejantes montos, el gobierno espera que los casos de abuso animal disminuyan aceleradamente. Si el bolsillo no es un aval para pensar dos veces antes de agredir a cualquier criatura, dos años tras las rejas quizás haga recapacitar a cualquier abusivo.
«El proyecto de ley simplemente subraya que la crueldad hacia los animales ya es inaceptable en Nueva Gales del Sur, y establece una serie de duras penas para aquellos que incumplan nuestras estrictas leyes», declaró el ministro.
Medidas como estas son las que buscan impulsar diferentes grupos proteccionistas y animalistas independientes, comparte esta noticia y que la nueva ley impulse a otros gobernantes a poner mano dura contra el maltrato animal.