Skipper es una cachorrita de pastor ovejero australiano que dejó a toda su familia boquiabierta desde el instante en que nació. Sus hermanitos fueron peluditos completamente sanos y saludables pero Skipper no tardó en diferenciarse del resto de la camada.
Tenía 6 patitas y dos colitas.
Tras una serie de pruebas, los dueños da la especial perrita se darían cuenta de que la pequeña estaba llena de muchas sorpresas más. Desde sus primeros días de vida, la dulce Skipper necesitó mucha ayuda.
Su madre la rechazó, así que no contaba con una fuente de alimento segura. Afortunadamente, los dueños se dieron cuenta de lo sucedido y se encargaron de darle biberones de leche cada vez que fuese necesario. Los veterinarios quedaron impresionados con su fortaleza.
Los perritos que nacen con estas condiciones rara vez logran sobrevivir pero Skipper parecía determinada a seguir luchando por su vida. La única explicación que los veterinarios han logrado encontrar es que Skipper tenía otro compañerito de camada pero los fetos no se separaron apropiadamente en el útero.
De esta manera, la cachorrita nació con algunos miembros que debían ser de otro peludito pero se desarrollaron en ella: No sólo se trata de un par de patitas extras y una cola extra. Skipper fue diagnosticada con monocephalus dipygus y monocephalus rachipagus dibrachius tetrapus.
Esto significa a pesar de que tiene una sola cabeza y cavidad torácica, hay otros órganos de los cuales presenta el doble: Tiene dos regiones pélvicas, dos vías urinarias inferiores y hasta dos sistemas reproductivos.
Hasta los momentos también hay sospechas de que sufra de espina bífida. Afortunadamente, la perrita se encuentra en las mejores manos posibles. Sus dueños están dispuestos a darle todos los cuidados extras que necesite y muchísimo amor.
Skipper pasó un par de semanas en el veterinario pero ahora ha regresado a su casa. Ya no necesita ayuda extra para poder hacer sus necesidades y ha demostrado que puede mover sus patitas de manera independiente y con cada vez más fuerza.
“Skipper ha mejorado mucho. Pasó toda la noche gateando y tratando de trepar sobre todo lo que encontraba”, dijo su dueña.
Es probable que la hermosa perrita necesite de mucha atención médica durante los siguientes años e incluso un par de operaciones. Su dueña, Jenni Golden, comenzó a reunir fondos para asegurarse de que nada le falte a la hermosa perrita.
Es un alivio saber que esta hermosa peludita está recibiendo tanto amor y cuidados. Muchos perritos son dejados atrás si nacen con algún problema de salud. Skipper tiene un gran camino por delante pero no hay dudas de que todos los esfuerzos para brindarle una buena vida valen la pena para verla mover sus dos colitas tiernamente.
¿Sabías que los perritos podían nacer con una condición como la de Skipper? Comparte esta nota para apoyar a este peludita tan especial a crecer fuerte y feliz.