Sin importar de dónde vengan, los perros son animalitos extraordinarios. Su sentido de nobleza, fidelidad, amor y paciencia para con sus humanos son características esenciales de estas mascotas.
En días pasados, ha comenzado a circular un conmovedor video en el que se muestra a una perrita fiel, de nombre Boncuk, esperando pacientemente a Cemal Senturk, su papá humano. Todo sucedió en las afueras de un hospital ubicado en Turquía, donde el hombre se encontraba enfermo y estaba siendo tratado.
Cuando Senturk fue trasladado de emergencia el pasado 14 de enero, Boncu siguió muy de cerca a la ambulancia hasta el hospital Medical Park, en Trabzon. A partir de entonces, realizó numerosas visitas a diario y se la vio deambular por el centro médico.
Por su parte, Aynur Egeli, hija primogénita de Senturk, aseguró que se llevaría a la perrita a casa. Sin embargo, no contó con que la entrega y el amor de este animal haría que se escapara una y otra vez y regresara de memoria al hospital.
“Traté de llevármela a casa, pero, en varias ocasiones se escapó para regresar a visitar a mi padre”, dijo.
Muhammet Akdeniz, un guardia de seguridad que ya la conocía, dijo que la perrita acudía al sitio todos los días, más o menos entre la 9 y 9:30 de la mañana. Quizás, esperanzada en que su padre humano saliera por la puerta principal y ambos pudieran volver a fundirse en un cariñoso abrazo.
“Viene todos los días alrededor de las 9 de la mañana y espera hasta el anochecer. No entra. Cuando se abre la puerta, asoma la cabeza dentro, para tratar de ver a su mejor amigo”, aseguró.
Por fortuna, el hombre salió de su convalecencia, fue dado de alta y sacado del hospital en una silla de ruedas. Así, Boncuk pudo finalmente reencontrarse de nuevo con él. No podía fingir su emoción. Según comenta Senturk, su perrita está demasiado acostumbrada a estar a su lado. Nunca en su vida se habían separado.
También aseguró que él también la echó mucho de menos en esos días que parecieron eternos. Felizmente, ambos pudieron retornar juntos a casa, con los suyos, después de que la devota perrita esperara durante días, apostada en la puerta del centro de salud.
Definitivamente, los perros son obra de la Providencia. De tal origen provienen su fidelidad y su entrega incondicional para con quien les quiere, les acepta y les da su verdadero puesto en la Naturaleza.
Son miles los casos en los que los perros reaccionan cuando su mejor amigo humano vuelve a casa. Y es que, la tristeza que les arropa cuando los dejan solos por mucho tiempo resulta para ellos un peso a cuestas difícil de sobrellevar.
Comparte esta historia con tus amigos. Los perros son como ángeles a los que el Creador, en lugar de alas, les dio cuatro patas y los puso en el mundo para enseñarnos el verdadero significado de la palabra Amor.