Hay países en el mundo que poseen una fauna tan diversa que es posible ver a los animales más exóticos en los lugares menos esperados, y uno de ellos es Brasil. Hace apenas unas semanas, un grupo de pasajeros de un autobús urbano quedaron sorprendidos al compartir su viaje con un ser bastante peculiar: un perezoso que captó la atención de todos.
La inesperada visita ocurrió cuando el conductor de autobús Ronaldo Santana cumplía su ruta diaria por la ciudad nororiental de Recife.
En horas de la mañana, Rolando y su colector Marcio Albuquerque divisaron al curioso animal que se trasladaba parsimoniosamente por la carretera y, ante el temor de que fuese atropellado por algún vehículo, decidieron detenerse.
«Estacioné el autobús en la parada y vi que algo se movía. Entonces nos dimos cuenta de que era un perezoso caminando hacia los automóviles», dijo Santana.
Marcio bajó de la unidad de transporte y tomó a la criatura con mucho cuidado para no lastimarla, ni lastimarse él con sus afiladas garras, después ambos subieron al autobús. Por un momento el hombre pensó en dejar al oso perezoso en una zona boscosa pero creyó que alguien podría lastimarlo.
En el momento en que el curioso animal subió a la unidad de transporte causó conmoción entre los pasajeros, quienes comenzaron a fotografiarlo y además aplaudieron la buena acción de los transportistas.
La gente quedó encantada con la llegada del oso.
Entre los viajeros del autobús se encontraba Danielle Miranda, una brasilera que quedó sorprendida con el singular pasajero con el que debió compartir su viaje de camino al trabajo.
«Fue muy amable de su parte. El conductor podría haber pasado, pero no lo hizo. Nunca había visto un perezoso de cerca”, dijo Moda Uniranda.
Estos osos son principalmente nocturnos, así que verlos a esa hora del día es toda una curiosidad.
Santana, quien lleva 17 años trabajando como chófer de autobús, dijo que era la primera vez que veía un perezoso en la carretera. Mientras que su compañero se mostró satisfecho por el hermoso hallazgo.
«Ese día, por casualidad, estaba de guardia. Menos mal que sucedió para que pudiéramos salvar a la pequeña criatura. Había visto muchos agutíes y caimanes, principalmente de noche, pero es la primera vez que veo un perezoso», dijo Albuquerque
Al final del viaje, este amiguito prefirió un lugar más privado para descansar.
Después de unos cuantos kilómetros, los transportistas pararon en un módulo policial para que las autoridades se encargaran del cuidado y la reinserción del perezoso a su hábitat natural.
Esta agradable experiencia hizo de este peludo el más fotografiado y comentado en las redes brasileras durante la última semana.
Estos osos son folívoros, su alimentación se basa exclusivamente en hojas, ramitas y brotes.
Nadie esperaría encontrarse con este pasajero en su camino al trabajo y para Albuquerque esto es algo que todos deberían valorar.
“La gente debería cuidar más la naturaleza y a estas criaturas. La deforestación en esa zona es terrible. Allí mueren tantos animales que me duele el corazón”, dijo el colector del autobús.
Los perezosos pueden vivir entre 20 y 30 años en su ambiente natural.
Más allá de la sorpresa de los pasajeros hay que aplaudir la buena acción de estos dos hombres, comparte esta historia y envíale tu reconocimiento a estas grandes personas.