Es bien sabido que los perritos son seres juguetones y completamente traviesos por naturaleza, aunque unos más que otros, no podemos negar que siempre buscarán la manera de hacer de lo normal algo realmente extraordinario.
Quien tiene o ha tenido una mascota sabe que con estos hermosos seres de luz y amor incondicional muchas veces hay que tener el doble de cuidado, pues muchos piensan que cualquier cosa es un juguete o todo aquello que este en el piso es comida.
Algunos perritos encuentran en las cosas más simples la mejor forma de divertirse.
Murphy es uno de esos perritos que no pierde la oportunidad de tomar todo lo que encuentre como un rico aperitivo, su madre, Farrah Smith Weiss, nunca imaginó que su última compra de maquillaje terminaría bajo el poder de su amada bola de pelos, aún más, que fuera el motivo de tiernas risas.
Recientemente, Weiss compró un lápiz labial y lo colocó en la barra de la cocina, sin embargo, la gata de la familia, Dolly Rose, golpeó con fuerza el labial mientras realizaba su caminata de diva por el mostrador y lanzó el lápiz labial al piso.
Ellos siempre buscarán la manera de crear nuevas aventuras.
Es probable que labial permaneciera en el suelo por un rato, hasta que apareció Murphy, quien sin dudarlo lo tomó y terminó con lápiz labial sobre toda la cara.
Al respecto Weiss comentó:
“Murphy no tenía ni idea de que había hecho algo malo. Si está en el suelo, asume que es comestible. Esta semana fue un paquete de chicle y el retenedor de mi hijo”.
Ante el curioso perrito, el labial no tenía ninguna oportunidad de salir ileso, Murphy se dispuso a comérselo y probar si le quedaba bien.
“Nos dimos cuenta que se había puesto lápiz labial después de caminar por la cocina, y noté que sus patas traseras estaban rosadas. Luego se dio la vuelta. Fue entonces cuando vimos su rostro.” Dijo Weiss.
Ante la adorable escena del perrito completamente pintado, Weiss y su esposo no paraban de reír, por supuesto, Murphy nunca imaginó que él era el motivo de tantas risas. Todo para este hermoso peludito parecía normal.
“Encontramos el cadáver de la barra de labios en su cama de perro gris, ahora rosa. Fue entonces cuando mi esposo tomó la foto de su rostro. No había nada qué hacer más que reír histéricamente porque bueno, el daño ya estaba hecho”.
Aunque el labial quedó completamente destruido, esta familia tiene un divertido recuerdo con sus mascotas.
Para el gato fue un juego lanzarlo de la barra y para el perrito un rico bocadillo. Sin duda, los mejores momentos se viven al lado de nuestras amadas mascotas.
Después de todo, la mejor manifestación de amor es ser feliz y ofrecerle felicidad a quien amas. Comparte esta historia en tus redes y cuéntanos alguna travesura de tu perrito que haya sido motivo de muchas risas.