Jabalíes, corzos, ciervos, zorros, conejos, aves, gatos monteses, liebres y perros son de las especies animales que más comúnmente solemos encontrar arrollados en las carreteras. Sin embargo, en algunos países también los elefantes deambulan libres y pueden correr la misma suerte.
Hoy nos trasladaremos a la provincia de Chanthaburi, en Tailandia, para contarte la historia de un paquidermo que fue salvado por un paramédico, tras ser atropellado por un motociclista.
Al llegar a la escena, el galeno se percató de que el elefantito, de apenas un mes de nacido estaba perdiendo el pulso y a punto de quedar inconsciente. Sin perder tiempo, comenzó a hacerle masajes cardíacos, mientras todos los transeúntes miraban la insólita escena con los pelos de punta. Por fortuna, el particular “paciente” respondió bien al RCP.
Resulta que, en horas de la noche de ese día, una manada de elefantes salvajes cruzó la mencionada carretera y, lamentablemente, uno de los bebés se asustó con una moto que pasaba por el camino. El motorista terminó colisionando al pequeño paquidermo y salió disparado de su moto estrellándose contra el pavimento.
El pobre animalito quedó tendido en el suelo, aterrado y gritando de dolor. De inmediato, la oficina de control forestal cercana a la zona del accidente envió a algunos de sus miembros para encargarse de la situación.
Mientras un grupo de paramédicos atendían al mareado y confundido conductor, otro profesional llamado Mana Srivate fue el designado para salvar al elefante, un tipo de paciente que, por cierto, nunca le había tocado ayudar en sus 26 años de carrera.
Mana comenzó a hacerle reanimación cardiopulmonar para que reaccionara. Fue un momento de increíble tensión para todos quienes presenciaron el espantoso accidente. Gracias al trabajo arduo de este hombre, el pulso regresó poco a poco y el bebé elefante logró ponerse de pie.
No obstante, su equilibrio era aún muy precario. En vista de ello, los voluntarios trasladaron al mamífero a un lugar cercano y más seguro, donde pudo finalmente recuperarse.
“Es mi instinto de salvar vidas, pero estuve preocupado todo el tiempo porque podía escuchar a su madre y a los otros elefantes llamando al bebé. Asumí la ubicación de su corazón, basado en la teoría humana y en un video que vi en línea. Y cuando el pequeño elefante comenzó a moverse, casi me largo a llorar”, dijo Mana Srivate.
Luego, la madre del pequeño reapareció para llevárselo consigo y dar un giro afortunado a este dramático hecho que, por suerte, terminó con un final feliz. En tanto, el motociclista fue llevado a un hospital y se está recuperando satisfactoriamente. Ni él ni el elefante sufrieron lesiones graves.
“Ambos fueron muy afortunados. El choque fue tremendo. Por fortuna llegamos a tiempo y pudimos salvar ambas vidas”, añadió Srivate.
En general, los proyectos viales han sido considerados como obras que representan un beneficio social y económico para las regiones y mejoran la calidad de vida de los habitantes. Por tanto, se constituyen en un elemento importante de desarrollo.
Sin embargo, la apertura de carreteras, al igual que todas las obras de infraestructura y actividades humanas, causa efectos negativos sobre el ambiente, cuya identificación y evaluación es importante con el fin de diseñar estrategias que eviten, mitiguen y compensen estos impactos.
Comparte esta historia con tus amigos. Si circulas por la noche con luz de carretera y divisas un animal, cambia a luz de cruce para no deslumbrarle y evitar que se quede parado en medio de la vía.