No hay nada como el amor que surge entre los animales y los niños para completar una familia. Esto fue lo que sucedió con Josiane y Karen, una pareja del mismo sexo que ha visto realizado su sueño de poder ser felices junto a su hijo Benício y su mejor amigo, un pollo llamado Romeo.
La singular amistad entre el niño, de apenas año y medio de edad, y el pollo, ha conquistado las redes sociales de todo el mundo, especialmente en su lugar de residencia, Botucatu, Brasil. Su amistad es completamente diferente, ya que en lugar de un perro, gato o cacatúa, el bebé eligió a un pollo como mascota.
Josiane Frazão Fim narra que su hijo Benício Frazão Fim tiene al pollo Romeo desde mayo de este año y, desde entonces, los dos son inseparables. El animal fue un regalo de la madrina de Ben.
Se aman mutuamente
El amor del niño por los polluelos comenzó cuando fue a la casa de su abuelo y tuvo el primer contacto con la especie animal. Ese mismo día, su madrina compró a Romeo en una casa agrícola en la ciudad y los dos crearon un fuerte vínculo de amistad.
Benício y Romeo juegan todos los días e incluso se bañan juntos. A pesar de crecer, el pollo nunca picotea a su amigo y ya se ha acostumbrado a ir a lugares en su regazo, contrario a lo que sucede con los otros animales de la familia.
“Tenemos un perro, pero no controla su fuerza, termina jugando y lastimando a Benício. Pero Romeo nunca picotea, Ben mueve la nariz y él no hace nada”, dice Josiane.
Los dos pequeños se acercaron aún más durante la pandemia, ya que pasaron al menos tres meses sin salir de casa. La amistad con Romeo ayudó a Ben a comer mejor, e incluso a estar más tranquilo cuando le nacían los dientes.
La vida cotidiana del inseparable dúo comenzó a ser compartida por la familia en las redes sociales. En sus perfiles ya cuentan con miles de seguidores y la mamá de Ben se asegura de siempre publicar nuevos videos, en diferentes lugares y con diferentes atuendos.
Pero, lo más importante es el bienestar del amado pollito y, para ello, semanalmente hay que cumplir con una estricta agenda que lo mantiene sano y limpio.
“El cuidado del pollo incluye bañarlo una vez a la semana con un jabón suave, jugar en la arena y darle maíz y vitaminas como alimento”, afirma la madre del niño.
Romeo vivirá entre 5 y 10 años. Por el tamaño de su cola, se estima que es macho
Romeo llegó para completar la familia de Benício, que además de tener un pollo como mascota, tiene dos mamás. Josiane y su esposa, Karen Fim, han estado juntas durante 16 años y tenían el sueño de convertirse en madres, intentaron quedar embarazadas durante ocho años, concibiendo finalmente a Benício por inseminación artificial.
Enhorabuena por esta hermosa familia y por la singular amistad entre Romeo y Benício. No cabe duda de que la amistad no entiende de tamaños, colores o especies.
Su amistad es única en el mundo
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Celebremos el amor hacia los animales y no te vayas sin compartir esta emotiva historia con todos tus amigos.