“¿Acaso existe un anhelo humano más triste o más intenso que desear una segunda oportunidad en algo?”. Bien lo dice Haruki Murakami, todos deseamos una segunda oportunidad, y en la medida de lo posible podemos enmendar nuestros errores y aprender del pasado.
Esto fue exactamente lo que sucedió con un grupo de guardias de seguridad quienes decidieron darle una segunda oportunidad a un adorable perrito después de ser expulsado del centro comercial.
Para un perrito agotado cualquier lugar es perfecto para descansar.
Es bien sabido que los perritos callejeros padecen una fuerte realidad, solos e indefensos hacen de cualquier lugar un refugio para poder descansar. Solo que en ocasiones lo hacen en lugares donde su presencia no siempre es bien recibida.
Así fue como un perrito callejero fue echado de los pasillos de un centro comercial en Filipinas.
Afortunadamente, el guardia que se acercó levantó al perrito con sutileza y con toda amabilidad
El hombre lo toma de sus patitas delanteras y el perrito lo acompaña tiernamente sin saber que sus intenciones era ser escoltado hasta la salida.
El video fue compartito por Jan Mart Calimpong, quien presenció la tierna escena. Al respecto comenta:
“Me alegra que no lo trataran con dureza cuando lo enviaron de regreso afuera. De hecho, el guardia lo escoltó como si fuera su mascota.”
Sin embargo, esto no termina aquí. Al parecer el equipo de seguridad decidió darle una segunda oportunidad al adorable perrito y lo han adoptado convirtiéndolo en un miembro del equipo de seguridad.
La noticia se dio a conocer y rápidamente se hizo viral, se desconoce qué fue lo que motivó a los guardias a tomar esta decisión pero nos alegra que le den el trato y respeto que todo peludito merece.
Han bautizado al perrito Dogdog
Gracias al noble gesto de los guardias el perrito ya no tendrá que preocuparse por ser expulsado, ahora oficialmente cuidará el lugar que tanto le gustaba visitar y tomar su siesta.
Recientemente, se han compartido nuevas imágenes del perrito en su ceremonia de bienvenida y posando junto a un guardia de seguridad llamado Rico Bucan.
Felizmente se forma en la fila junto a sus nuevos compañeros de trabajo.
El perrito posa orgulloso en las filas de su nueva familia: los guardias de seguridad quienes lo acogieron y lo hicieron parte de su equipo.
“Creció aquí en el centro comercial donde yo trabajo. Dogdog siempre se une a nosotros cuando tenemos nuestra guardia montada. Es un perro muy amable», dijo Bucan.
Sin duda, ahora tienen al mejor guardia de seguridad de la historia. Infinitas gracias por darle esta segunda oportunidad y permitirse acoger a un perrito que solo quiere dar amor y ser amado.
Todos merecemos una segunda oportunidad, y los perritos no son la excepción. En tus manos está el poder de transformar una vida. Adopta y devuélvele la esperanza a un peludito. Sigamos difundiendo esta historia y compártela en tus redes.