Por lo general, son las personas quienes eligen a sus mascotas pero hay algunas criaturitas que sintiendo una conexión especial con ese humano, optan por hacer absolutamente todo para que los lleven a casa. De este modo tan peculiar le ocurrió a Brittany cuando se topó con una hermosa gatita que hizo un gran alboroto para que ella la notara y rescatara.
La pequeña fue bautizada como Bubbles.
El día en que Brittany y la gatita se encontraron, la joven iba camino a rescatar a otro felino y jamás imagino que esa tarde serían dos los casos que atendería.
Esta mujer es voluntaria de Sparkle Cat Rescue, un refugio de gatitos abandonados que ha funcionado desde el 2014 y opera en Carolina del Norte.
Ahora Bubbles recibe un trato especial.
Brittany transitaba en su vehículo por una calle boscosa cuando la gatita color ceniza salió a su paso, la minina no dejaba de maullar y corría desesperadamente tras ella. En principio la mujer pensó que se trataba de una ardilla o algún otro animal pero bastaron segundos para notar que era un felino en apuros.
“Estaba segura de que era una ardilla al principio, pero después de pasarla, vi en mi espejo que corrió hacia un árbol y se detuvo. Me di la vuelta inmediatamente para ir a verlo”, relató Brittany.
En efecto no era ninguna ardilla, sino una tierna gatita en busca de ayuda y parece que había dado con la persona indicada. Brittany no dudó ni un segundo en ir a ayudarla.
“La levanté y la envolví con fuerza en la toalla para que pudiéramos llegar por el camino. Ella viajó cómodamente toda la vía. Se bañó y comió algo, y el bebé tenía mucho de qué hablar. Casi parecía que estaba perdiendo la voz porque había estado llorando durante tanto tiempo”, dijo Brittany
Esta dulce almita no merecía ser dejada allí.
Brittany desconocía cuánto tiempo había esta la criaturita en el lugar y tampoco tenía la menor idea de si existía un dueño pero no iba a dejarla sola. Por ese motivo, después de rescatarla hizo una pequeña investigación por la zona para saber si había alguna familia buscándola pero todo fue en vano.
El panorama parecía indicar que Bubbles era otra minina abandonada.
Al principio la pequeña estaba muy débil y delgada pero en cuestión de días logró reponerse con los cuidados de Brittany y ahora luce como una hermosa felina. Además, su nueva dueña descubrió que la pequeña era aún más mimada de lo que parecía, “ella quiere amor todo el tiempo. Es bastante aficionada a los abrazos”, comentó.
Nos alegra que esta pequeña haya tenido un final feliz, sin duda ir tras Brittany fue la mejor decisión. Comparte esta tierna historia y envíale a Bubbles todo tu amor.