Cuando se presenta una catástrofe natural, la acción de los rescatistas es indispensable para atender la emergencia y evitar a toda costa la pérdida de vidas humanas. Y posiblemente cuando hablamos de rescatistas lo primero que llega a la mente son los bomberos y demás miembros de protección civil, pero hay unos héroes con patas que silenciosamente hacen su grandioso trabajo.
En esta oportunidad, uno de ellos se ha vuelto noticia en el Perú, después de salvar varias vidas en un derrumbe que se produjo en la ciudad de Abancay. Se trata de Bono, un border collie mestizo y veterano que apenas llegó al lugar del derrumbe se puso patas a la obra.
El perrito utilizó su gran olfato y agudo oído para detectar una zona clave. Después de merodear por todo el lugar, Bono condujo a sus colegas hasta un terreno con escombros en el cual estaba sepultada una persona.
Espacio en el que se produjo el rescate.
Los bomberos sabían que el perro había detectado algo pero no tenían ni idea de si se trataba de una o varias personas y menos aún bajo qué condiciones se encontraban, temían que fuesen sólo cuerpos pero de inmediato entraron en acción.
Todo el equipo de Protección Civil trabajó en esta operación pero Bono fue el protagonista.
Los hombres utilizaron sus herramientas y propias manos para mover ágilmente cada una de las piezas de concreto que había en el lugar, mientras lo hacían sólo oraban porque quien estuviese abajo pudiese resistir hasta que lo hallaran.
Por fortuna, el tiempo fue el necesario y cuando por fin removieron todos los escombros se percataron de que se trataba de un hombre.
Bono estaba feliz de poder ayudar.
Un humilde albañil que trabajaba en la zona era la persona atrapada entre los escombros y estaba vivo gracias a los esfuerzos de los socorristas y al buen trabajo de Bono. El hecho de que saliera con vida del lugar emocionó a todos, incluso el perro parecía entender la alegría de todos.
Durante esa larga jornada ni Bono ni sus compañeros humanos tuvieron tregua e hicieron todo lo posible por ayudar a todos los afectados. Lo más emotivo del caso era ver al comprometido animal trabajando sin descanso para encontrar a todas las personas posibles.
Bono sólo se tomaba breves descansos para refrescarse o recibir un poco de motivación de parte de sus jefes y compañeros que rascaban su pancita para animarlo a continuar.
En el mundo hay millones de perros pero no todos son tan valientes como Bono y seguro más de un Cuerpo de Seguridad daría lo que fuera por tener un integrante tan inteligente y eficiente como este animal.
EL albañil volvió a nacer gracias al olfato de este perro y después hay quien los maltrata o abandona, comparte esta historia y que todos vean lo maravillosas que son estas criaturas.