Hace varias semanas Elina Walsh notó que había algo en una de las paredes de su casa, era una figura de aspecto extraño por lo que no pudo reconocer de qué se trataba de inmediato.
Tras ir a inspeccionar lo que era fue cuando se dio cuenta de que se trataba de una pequeña araña a la que le faltaban más de la mitad de sus patas.
No estaba claro de cómo exactamente la araña había perdido seis de sus patas. Las posibilidades de supervivencia para este pequeño animalito eran muy pocas. Afortunadamente Elina tomó la decisión de ayudarla.
“Inmediatamente sentí pena por ella, así que decidí cuidarla. Seguro habría tenido problemas para cazar por su cuenta», agregó Elina.
Después de investigar un poco, Elina descubrió que las arañas tienen la capacidad de hacer que sus patas vuelvan a crecer, lo que significaba que la araña tenía posibilidades de llevar una vida normal.
A pesar de su condición esta pequeña araña a la que Elina llamó Peggy es una luchadora.
“Incluso con solo dos patas, tenía un fuerte deseo de vivir”, dijo Elina.
Durante las semanas siguientes Elina se convirtió en la madre de Peggy, la cuidó, le dio agua y comida.
Su recuperación fue lenta, pero segura y con los días su cuerpo comenzó a transformarse.
«Con la alimentación semanal, recuperó fuerza suficiente para hacer que sus patas crecieran de nuevo. Fue realmente fascinante verla», agregó Elina.
Mientras tanto, a medida que las patas de Peggy crecían, también lo hacía el amor de Elina por ella.
“No creo que las arañas tengan la capacidad de formar un vínculo, pero es seguro que me siento apegado a ella», dijo Elina.
Después de unas cuatro semanas el cuerpo de Peggy fue cambiando y creciendo, las patas que había perdido emergieron de nuevo.
«Ojalá no vuelva a meterse en problemas», dijo Elina.
Aunque Elina se siente apegada a Peggy su plan es devolverla a la naturaleza después de que sus patas estén recuperadas.
«Se siente bien saber que pude ayudar a un animal y educar a otras personas sobre estas increíbles criaturas y mostrarle al mundo el otro lado de las arañas. Muchas personas aracnofóbicas han admitido que ahora sienten de manera diferente a las arañas e incluso pueden apreciarlas».
Indudablemente que esta pequeña araña logró sobrevivir gracias al tiempo y los cuidados que le dedicó Elina en su recuperación.
Comparte esta historia que nos demuestra que los milagros de amor sí existen y como dice Elina, las arañas también merecen una oportunidad.