El desarrollado sentido del olfato del cual gozan algunas criaturas como los perros siempre ha sido bien sabido por todos. Pero en esta ocasión no sólo hay que reconocerlo sino agradecerlo, puesto que gracia a esto un leal labrador logró salvarle la vida a su joven familia.
Su nombre es José Ignacio y se convirtió en el héroe de la casa, después de que alertara a sus dueños sobre una grave fuga de gas doméstico que habría hecho explotar la residencia.
Este amiguito es todo un héroe.
Este labrador negro de sólo 4 años vive con los esposos Rodrigo Ípperi y Maillén Novoa, quienes se encontraban dormidos la noche del incidente.
Eran alrededor de las 4:00 am cuando José Ignacio entró a la habitación de sus papás humanos y los despertó, la criatura estaba desesperada y los esposos pudieron notarlo. En principio, ellos creyeron que el can quería ir al baño, no sospechaban en absoluto el peligro invisible que estaba esparcido por su hogar.
Para esta familia José Ignacio tiene un lugar muy especial.
Rodrigo y Maillén se levantaron para llevar a José Ignacio al jardín, pues creían que su inquietud eran simples ganas de ir al baño.
“Nos sentíamos cansados y nos acostamos temprano, como a las 4 de la madrugada nos despertó el perro muy sobresaltado. Estaba tembloroso, los ojos llorosos y como si algo le estuviera pasando, hacía un ruido raro. Pensando que estaba descompuesto lo sacamos al patio y cuando volvimos a entrar a la casa nos abombó el olor a gas”, relató Rodrigo.
La angustia del perro tenía una justificación y en ese momento en que sintieron el olor supieron qué era lo que realmente sucedía.
Los esposos abrieron rápidamente todas las ventanas para que la casa se ventilara y pudiese salir el gas acumulado, sólo un corto o una pequeña chispa y todos hubiesen explotado.
¡Afortunadamente, nada de esto sucedió!
La pareja decidió regresar a la cama después de que el olor se había ido y se aseguraron de que el gas estuviese cerrado, pero a la mañana siguiente algo inesperado pasó. Maillén se encontraba en su último período de embarazo
“La atendieron en la Guardia y como tenía presión elevada la llevaron a maternidad. Entre los médicos hicieron las consultas y cerca de las 21 horas nació Amanda”, dijo Rodrigo.
El labrador salvó a todos en casa, incluso a la pequeña bebé que venía en camino y los esposos no saben cómo agradecerle por su heroico acto.
José Ignacio se convirtió en el hermano mayor de Amanda.
El técnico de gas que revisó la fuga comentó que se trataba de un problema grande y que realmente habían corrido un grave peligro, incluso, de morir envenenados por el hidrocarburo.
“Era impresionante la cantidad de gas que perdía, cuando el gasista lo revisó no podía creer que perdiera tanto. Lo cierto es que la sacamos barata gracias a José Ignacio, nuestro perro, que pudo reaccionar y despertarnos sino seguramente hubiera sido otra la historia y con otro final”, expresó.
La familia logró regresar a casa ya sin ningún peligro y con la pequeña bebé Amanda en sus brazos, la primera hija de estos jóvenes. Ahora tienen a dos seres muy queridos a quienes mimar, pues estamos seguros que jamás olvidarán el acto heroico de su perrito.
Ellos son más inteligente de lo que muchos pensamos, comparte la historia de José Ignacio y que más gente aprenda a valorar a sus propias mascotas.