Los animales no dejan de sorprendernos. Este camello escapó de su nuevo hogar después de recibir malos tratos y caminó 100 kilómetros en el desierto para volver con sus antiguos dueños.
Por un lado, nos alegramos por la reacción de este animal, quien escapó tras extrañar el amor al que estaba acostumbrado, y por el otro lado nos entristece que existan personas que les hagan daño a estos seres tan vulnerables.
Esto sucedió a principios del mes de julio cuando un agricultor vio a un camello en el desierto de Mongolia.
¿Por qué había huido el camello de su hogar y había decidido atravesar el desierto en busca de sus antiguos dueños, quienes lo habían vendido? Era la pregunta que todos se hacían.
La respuesta estaba a simple vista en el cuerpo del pobre animal, quien tenía las marcas de las agresiones que había recibido.
La explicación era clara, el camello había sufrido malos tratos y por eso estaba intentando regresar a la que fue una vez su casa.
Conmovido por su lealtad, el pastor de Urad Rear Banner en el noroeste de la ciudad de Bayannur, en Mongolia, en el interior del norte de China, decidió quedarse con este camello que había vendido por el resto de su vida.
El propietario reveló que vendió su amable camello en octubre de 2019 a un amigo que quería criar camellos, pero justamente hizo todo lo contrario.
Sus dueños lograron recuperarlo, pero a cambio de una hembra de solo tres años. Y al ver el estado del animal hicieron una promesa.
«Ya no lo venderemos a nadie más. Los camellos son animales inteligentes. Será libre para el resto de su vida», dijo su dueño.
La historia de este animal se dio a conocer en las redes y ha conmovido a miles de personas que han expresado su solidaridad con este adorable animal.
El vídeo ha sido visto por más de 16 millones de personas.
«No puedo imaginar las dificultades con las que se encontró. Debió haber extrañado tanto su hogar. Cada animal tiene un alma», fue uno de los comentarios de los usuarios.
Según información local, el camello caminó más de 100 kilómetros solo, atravesando montañas y ríos.
Cruzó vallas y carreteras antes de llegar finalmente a casa.
Su familia manifestó que los camellos son muy espirituales, y fue su increíble lealtad la que los hizo reaccionar y prometerle que jamás arriesgarían de nuevo su destino, entregándolo en manos de gente sin escrúpulos.
Lo cierto es que el amor, y la lealtad son valores de nuestros amigos los animales, de quienes tenemos mucho que aprender. No te vayas sin compartir esta emotiva historia.