Los animales conocen muy bien lo que significa el sentido de la lealtad y agradecimiento, especialmente cuando han sido rescatados y tratados con mucho amor hasta lograr su completa recuperación.
Tanto es así que esta pequeña ardilla no quiere separarse de sus padres humanos a pesar de que le han dado la libertad para que viva en su hábitat natural.
Este tierno video ha conmovido a todos, y ¿cómo no enamorarse de esta pequeña ardilla?
Ella no deja pasar la oportunidad de relajarse en la espalda de Joseph mientras viajan en el automóvil.
Si alguien duda de que esta ardilla se siente totalmente cómoda, segura y amada basta con ver este vídeo para saber que es un animalito muy feliz.
Le encanta abrigarse con la camiseta de su dueño y dormirse con las dulces caricias.
Uno de los viajes que más disfruta es ir a la playa, realmente le fascina estar en la arena donde siente plana libertad de correr, cavar, y hacer el rol de vigilante tratando de encontrar algún tesoro escondido.
Cuando sus padres la rescataron se encargaron de alimentarla con biberón, ella simplemente comía con mucho gusto y se hizo la mejor amiga de Joseph.
Aunque sus bigotes quedaran llenos de leche ella seguía siendo una ardilla muy adorable que disfrutaba dormir la siesta acurrucada en el regazo de su madre.
El cabello de Joseph es el mejor lugar para esconder su comida. Ella siempre regresa con él porque sabe que es su bebé.
A pesar del amor que esta pareja le tiene a la pequeña ardilla sabe que es un animal de la vida silvestre, es por ello que Joseph se ha preocupado de hacer con ella algunos juegos que resultan en actividades que le permiten desarrollar sus habilidades naturales.
Sin embargo, esta pequeña parece que no quiere dejar el hogar donde ha recibido tanto amor y cuidado. Incluso su padre la ha incentivado a que permanezca en los árboles del jardín, pero no pasa más de 10 minutos para que ella se sienta aburrida y regrese a la casa.
Cada mañana Joseph se ocupa de cumplir una rutina de actividades para que la pequeña del hogar pueda drenar esa energía y siga siendo tan saludable como hasta ahora.
Cuando su papá la acaricia ella le responde el cariño abrazando sus dedos hasta quedar rendida.
Sus padres saben que existe la posibilidad de que algún día pueda pasar algo que la haga irse, y aunque la amen con locura y adoren su compañía, para ellos lo más importante es que ella sea feliz.
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