Iris es una gatita que pasó todo su embarazo en las calles de California, pero no se había atrevido a dar a luz porque sabía que sus bebés no estarían a salvo sin un hogar.
Cuando la gatita fue hallada estaba desnutrida y llena de pulgas.
La vida para un gatito en las calles no es nada sencilla. Pasan años luchando contra toda clase de peligros y hay veces en las que no pueden hacer más que pedir ayuda y esperar a que un buen humano los salve.
Una linda gatita llegó al refugio en un estado de salud muy delicado.
La gatita fue atendida en la fundación RSQ209.
Se notaba que llevaba varios días sin comer como es debido y se veía muy débil. Por si esto fuese poco, la dulce gatita estaba embarazada y se convertiría en madre en nada menos que una semana.
Había que actuar rápidamente para poder salvarla a ella y a los gatitos bebés que venían en camino.
Decidieron llamarla Iris y la llevaron de inmediato al veterinario, su estado de salud necesitaba atención, pero tenía muchas fuerzas y con la ayuda de los rescatistas lograría mejorar en muy poco tiempo.
Lo más importante era que encontrara un hogar temporal para poder recibir tratamiento. Angela Su, una voluntaria, le abrió las puertas de su casa sin pensarlo dos veces y le aseguró a la gatita que estaría sana y salva.
«Creo que ella comprendió que conmigo estaría a salvo«, aseguró Angela.
Angela estaba preparada para que el nacimiento de los gatitos fuese en aproximadamente una semana.
Sin embargo, Iris los sorprendió a todos y dio a luz la misma noche en que llegó a su hogar temporal. Estaba claro que finalmente se sentía segura y sabía que allí recibiría ayuda para que a sus gatitos no les faltara nada.
“Un par de horas después de su llegada comenzaron las contracciones. Dio a luz a cuatro bebés completamente saludables”, dijo Angela.
Angela no estaba preparada para un momento tan delicado, pero todo salió bien. Contactó a un veterinario para que la ayudara a lo largo del proceso y después de un par de horas la agotada madre ya se encontraba dando besos a todas sus crías.
“Iris sabe cuidar a sus gatitos. Cuando ellos no hacen caso ella comienza a maullar para decirles lo que deben hacer”, dijo Angela.
Iris resultó ser la mejor mamá del mundo, en ningún momento se separa de sus pequeños. Los baña constantemente y se asegura de darles mucho amor y comida, Iris es una mamá tan dedicada que en ocasiones se olvida de tener tiempo para ella.
La gatita sólo se alimentaba cuando Angela le acercaba un plato ya que Iris se niega a alejarse de sus bebés.
Iris es muy insistente a la hora de bañar a sus bebés. Todos los días reciben su respectivo baño y si alguno de los cachorritos se quiere escabullir la atenta mamá gatuna maúlla fuertemente hasta que el cachorro regresa.
«Iris puede ser muy vocal a la hora del baño, sobre todo si sus pequeños no le está haciendo caso», dijo Angela.
La gatita inspecciona cada plato de comida y cada nuevo juguete que llega a sus cachorros. Sabe que sus bebés la necesitan para estar seguros.
«Me rompe el corazón pensar en qué hubiese podido pasar si no la hubiésemos tomado bajo nuestro cuidado», dijo Angela conmovida.
Es un gran alivio saber que los rescatistas salvaron a la gatita justo a tiempo. Todos los peluditos merecen estar en un lugar seguro, especialmente si se trata de una madre que está a tan sólo días de dar a luz.