Una perrita es como una niña, y al igual que ellas aman a sus juguetes. Algunos de estos están pensados para que los animales pasen un buen rato divirtiéndose y, hasta se convierten en parte de su vida. Como en el caso de nuestra protagonista.
Una perrita que tiene una gran variedad de esponjosos y amados juguetes
Y si no, preguntémosle a Poi, una adorable golden retriever quien siempre lleva un juguete distinto cada vez que sale a pasear. Cuando la adorable perrita se siente agotada de tanto jugar, tan solo se recuesta sobre ellos un buen rato.
La canina se queda plácidamente dormida junto a sus amados peluches, y es allí cuando, en su envidiable siesta, repara fuerzas y vuelve a salir al ruedo. Su vida se basa tan solo en la más pura diversión.
La perrita fue bautizada con ese nombre, como una abreviatura de Poseidón, dios griego de los mares y los océanos. Ella cuenta en su haber con una multiplicidad de esponjosos juguetes y muñecos de todas las clases, tipos y colores.
Los hay para escoger, de modo que, cada día se decide por uno u otro antes de salir de la mano de su padre humano a pasear al aire libre. Es más, a decir de este, los juguetes funcionan como una especie de “manta de seguridad” para ella.
“Siempre le encantó llevar algo en la boca desde que era una cachorra”, dijo el hombre.
De hecho, son tantas las opciones que, a decir de su cuidador, Poi pasa por un proceso de escogencia antes de salir a la calle. Ella decide cuál le gusta más cada semana, dependiendo de cómo vea el día amanecer.
Además, Poi posee otro gran talento: la inteligente perrita, no solo es capaz de sostener en perfecto equilibrio a sus adorados juguetes. También lo hace con sus alimentos. Ayudándose con su cabecita, no deja que caigan al suelo.
Tiene una gran habilidad de equilibrio
Y es que, Poi es una perrita muy astuta, que no solo sabe divertirse con sus peluches de ensueño para ella. También los usa como grandes almohadones donde se echa cuando se siente agotada de tanto saltar y jugar.
“Llevar los juguetes con ella le brinda cierta sensación de comodidad. Verla hacerlo y la expresión de felicidad en su rostro es simplemente adorable”, aseguró el padre de Poi.
Poi y su colección de amigos de peluche
Sin duda, esta perrita adorable enloquece con sus fantásticos y versátiles juguetes. Simplemente no puede evitar tomar uno cada vez que su padre abre la puerta de la casa y la llama a jugar fuera.
Y es que, una vez más queda demostrado que, al igual que nosotros los seres humanos, cada mascota tiene algo que los hace únicos y los identifica. Eso es, precisamente, lo que nos consuela y nos llena de felicidad en nuestros días tristes.
Aunque su forma de madurar es distinta a la nuestra, siempre hay que tener en cuenta la edad de una mascota a la hora de escoger un juguete. No es lo mismo un cachorro o cachorra que un perrito o perrita adulto.
Por ejemplo, un pequeñín de tres meses tiene aún los dientes de leche, por lo tanto, a esa edad, sus juguetes deberían estar hechos de tela o goma muy blanda. Una vez pasada la dentición, el animal ya tendrá una mandíbula más fortalecida.
En conclusión, si convives con una mascota, no solo es importante que sepas cuidar de su salud y vigilar su alimentación. Jugar es una actividad esencial para su desarrollo cuando son cachorros y, también, cuando son adultos. Solo preguntémosle a Poi cuánto adora jugar.
Los peluches pueden ser una excelente opción para ofrecerles. A los peludos les fascina acurrucarse sobre ellos para dormir. Eso sí, asegúrate de que sean son los suyos y no los confundas con los de los niños de la casa.