Jenni y Guy son una pareja de cuidadores de caballos y dueños de una reconocida granja en África, llamada Saratoga Stud. Ambos tienen pasión por los equinos y especialmente por las yeguas cuando se convierten en madres.
Confiesan que asistir a las preñadas en el momento decisivo de traer una nueva vida al mundo, es una de las experiencias más sublimes de su vida.
La yegua Treliver D’Aquitaine, también conocida como Daisy, había sido importada de Inglaterra y estaba esperando un bebé del gran semental Treliver Decanter. Ya llevaba 7 días de retraso cuando de pronto, sus perros guardianes los alertaron con fuertes ladridos de que había llegado la hora del parto.
«Estábamos muy emocionados por el bebé que saldría de su vientre», dijo Jenni.
Jenni y Guy se apresuraron al establo, poco después de que llegaron, Daisy acababa de dar a luz al más alucinante potro.
«Nos sorprendió que un potro tan pequeño hubiera nacido de una yegua tan grande como Daisy, pero estábamos encantados con lo hermoso que era».
Jenni se sentó junto al pequeño mientras tomaba sus primeras bocanadas de aire
Mientras que Guy comenzó a ayudar a ponerse al potrito de pie.
El pequeñito fue bautizado como Don Quijote
Mientras la madre lo limpiaba, el cuidador de la granja lo sostenía para que lograra mantener el equilibrio
Jennni cuenta que así lo han hecho con todos los potros que nacen en ese lugar, les brindan toda la ayuda necesaria para que puedan ponerse de pie cuanto antes.
Pero al parecer, el trabajo de Daisy no había terminado y se estaba reservando la mejor de las sorpresas.
Cuando vieron su placenta se quedaron sin palabras, ¡la madre estaba dando a luz de nuevo!
«Daisy se acostó porque se dio cuenta que así sería más fácil. Metí mis manos en el canal del parto y pude sentir un par de patitas y ella estaba con contracciones, como un parto normal, y entonces mi pánico fue enorme», contó Jenni.
Desafortunadamente, la cría venía en posición de nalgas. Pero la madre, que ya tenía una cría por la que velar, estaba más preocupada por su primer bebé que por empujar.
Jenni y Guy estaban realmente ansiosos y temían que la segunda bebé nacería muerta. Se aguantaron la respiración mientras la pequeñita salía del vientre de su madre. Pero de pronto, ¡estaba viva y respirando!
Daisy tuvo una segunda potra cremello, hermana gemela de Don Quijote, a la que llamaron Duet
Era pequeña pero fuerte y una luchadora, con ganas de ponerse de pie en cuestión de minutos y lista para beber una vez de pie. Era verdaderamente un milagro.
Daisy tuvo 2 pequeñitos pero saludables potros milagro. La probabilidad para una yegua de dar a luz potros gemelos con vida y saludables es mínima.
Duet lo está haciendo de maravilla, sólo necesita un poco de apoyo para mantener el equilibrio.
Jenni la alimentó con biberón del calostro de Daisy cada dos horas, durante varios días, hasta que vieron que ya podía valerse por sí sola.
Mira en este video lo excelente madre que es Daisy, no puede estar más orgullosa de sus dulces bebés:
No te vayas sin compartir este gran milagro que sin duda alegrará el corazón de más de uno. ¡El don de la vida es grandioso! La Naturaleza siempre nos cautiva con las más dulces sorpresas.