La historia de Simba, un cachorro de león cuya vida ha estado sumergida en un valle de injusticias, ha conmovido a todos en el mundo. Personajes como Vladimir Putin están exigiendo una severa investigación contra las personas que se encargaron de hacer el primer año de vida de este animalito, una verdadera tortura.
El felino fue rescatado recientemente en las más terribles condiciones, pues desde su nacimiento fue utilizado como una forma de lucro en el sector turístico.
Los antiguos dueños del león lo utilizaban para que turistas se fotografiaran junto a él en prestigiosas playas, pero para lograrlo recurrieron a las medidas más terroríficas. Para evitar que Simba intentara escapar quebraron sus patas de forma deliberada.
El pequeño león fue separado de su madre pocas semanas después de nacer y a partir de allí comenzó la explotación.
A medida que creció el felino fue expuesto a los actos más dolorosos, incluida las lesiones intencionales en sus patas para evitar que escapara a medida que fuese creciendo.
El dolor que estas personas le causaron a la pobre criatura no tiene comparación, el felino fue vulnerado tan brutalmente que lo dejaron atado en un granero al punto de la muerte.
Los rescatistas quedaron conmovidos con el grado de sus lesiones el día en que lo hallaron en la región rusa de Daguestán.
En ese momento Simba no se podía mover por sí mismo, pues los golpes que recibió en su cuerpo habían afectado su columna vertebral.
Además estaba sediento y con evidentes señales de desnutrición, en esas condiciones le era imposible sacar energía para intentar escapar.
Aunado a eso, los desalmados que lo lastimaron decidieron también utilizar una cuerda para anular cualquier intento de huida.
Después de lucrarse con el felino tras su nacimiento en el verano del año pasado, sus captores decidieron abandonarlo en ese estado, lo cual se traducía en una evidente sentencia a muerte.
Además esto, Simba también tenía úlceras por presión, obstrucciones intestinales y una pérdida de masa muscular en las extremidades posteriores.
No hay razón para cometer estos actos contra Simba ni ninguna otra criatura.
Por justicia divina, el moribundo Simba fue rescatado a tiempo por un grupo de profesionales que han liderado una misión justiciera por salvarlo. El animalito fue intervenido después de su rescate para lograr restaurar el daño en su columna.
Un emotivo vídeo muestra al león tambaleando, mientras intenta caminar con su cuerpo todo adolorido después de la cirugía.
Karen Dallakyan el veterinario que atiende al felino describió su situación como «un océano de dolor ocasionado por parte de los humanos».
“Los fotógrafos malvados quiebran huesos como este para que los depredadores salvajes no puedan escapar y comportarse con calma para tomar fotos (con turistas). Esto fue un verdadero infierno”, dijo Dallakyan.
Milagrosamente, Simba se ha ido recuperando pero tendrá que vivir con deformidades permanentes.
Mientras el felino intenta salir adelante, las autoridades investigan este caso de abuso para llegar hasta las últimas consecuencias legales.
Por su parte, el gobierno de Vladimir Putin ordenó una investigación criminal, que ya dio con la captura del fotógrafo que explotó a Simba el verano pasado. Pero éste niega haberle ocasionado todas las lesiones que el felino tenía en su cuerpo al momento de ser rescatado.
El mundo está consternado con este caso que nos llena a todos de profundo dolor, pero estos actos sólo pararán cuando todos dejemos de consentir este tipo de atracciones turísticas. Detrás de toda actividad que incluya a un animal fuera de su hábitat natural para complacer a turistas, se esconden las más terribles historias de maltrato y sufrimiento.
El dolor que pasó Simba es inimaginable y aún debe lidiar con esto, por favor comparte esta historia y ayúdanos a hacer presión para que la justicia detenga a quienes le hicieron tanto daño.