El coronavirus ha puesto de moda las celebraciones de cumpleaños a través de videollamadas pero ninguna ha sido tan especial como la de Catharina Chagas, la dueña de una perrita bastante especial que terminó por robarse la atención de todos en plena fiesta.
Se trata de Lolita una perrita de rescate con un espíritu bastante dulce y travieso.
El pasado mes de mayo Cagas estuvo de cumpleaños y para celebrarlo organizó una pijamada en línea con familiares y amigos cercanos, pues debido a la pandemia ninguno podría asistir a pasar junto a ella ese día. La única que acompañó personalmente a la mujer fue su fiel compañera Lolita.
Todo marchó a la perfección y Chagas cortó el pastel para compartir de modo simbólico con sus invitados y la pequeña Lolita no se aguantó ante el delicioso postre e hizo de las suyas.
Cuando la fiesta casi terminaba y ya habían cantado cumpleaños, Chagas dejó sola a Lolita en el apartamento para llevarle un poco de pastel al portero del edificio.
En ese momento, la perrita no pudo aguantar tanta tentación y cayó rendida ante sus deseos de un poco de dulce, así que terminó cometiendo el crimen perfecto. Al menos eso era lo que creía Lolita, quien se acercó sigilosamente a la mesa en la que estaba la tarta y decidió darle una probadita.
Así de tierno era el pastel de cumpleaños de Chagas.
Lo que esta amiguita no sabía era que los invitados de su mamá humana no se habían despedido y detrás del ordenador estaban al menos 12 personas que presenciaron entre risas su travesura.
Los amigos de Chagas no podían creer lo que sucedía, Lolita era más inteligente de lo que todos pensaban y no sólo mordió una rebanada de pastel sino que terminó por tumbarlo y comérselo por completo. Después de esto, la perrita simplemente se alejó antes de que llegara su mamá.
Acá Lolita en plena acción durante la travesura.
Orlando Colavolpe Neto, uno de los amigos de Chagas que acudió a la fiesta virtual relató entre risas lo que había sucedido.
«Fue divertido. Todos estábamos desesperados, tratando de llamar su atención y evitar que lo hiciera. A Lolita no le importaba nada más que comer el pastel», dijo Neto.
Los amigos de Chagas estaban tan sorprendidos que registraron el divertido momento.
Por fortuna, Lolita tiene a una madre amable que no se enojó en absoluto por lo que había ocurrido. Aunque la mujer confiesa que en principio todo fue confuso pues sólo encontró restos de pastel en el piso y a sus amigos muertos de risa
«Estaba muy confundida, porque el pastel estaba en el piso y se lo comió. Todos mis amigos se reían. Me enviaron el vídeo de lo que sucedió. Me reí mucho. Nunca podría estar enojada con Lolita», dijo Chagas.
Aunque se haya quedado sin pastel, su mejor recompensa es pasar la vida junto a su perrita, es quien le da felicidad. Comparte esta historia y dales un poco de alegría a todos con el divertido vídeo.