No nos cansaremos de decir que hace falta ser tremendamente ruin y miserable para perpetrar actos de crueldad contra un perro. Especialmente cuando se trata de un cachorro y cuando en su mirada sólo se puede ver que hay amor y perdón.
Un humilde rescatista de animales, sin muchos recursos, pero con las mejores intenciones, que suele hacer lo que está en sus manos para salvar a animalitos de un triste destino, fue alertado por unos granjeros.
Trần Thế acudió inmediatamente a las vías del tren, en Tailandia, pero jamás imaginó encontrar una escena así
Se trataba de un cachorro de pastor alemán, que estaba tirado al pie de las vías del tren, paralizado y con signos de evidente maltrato.
Su carita de desesperación y de profundo dolor desgarró el corazón del joven
Lo habían apedreado hasta el cansancio y después lo «tiraron» como algo inservible. El joven no dudó en intervenir de inmediato.
El chico quiso ir de a poco, ganándose su confianza primero. Cuando se acercó a acariciarlo al borde del camino, estaba lleno de dolor.
Era tan incapaz de moverse, que rodó hacia la cuneta quedando boca arriba, asustado, suplicando ser ayudado, en una escena absolutamente desgarradora.
Lo tomó en brazos con absoluto cuidado y amor, y lo puso en una cesta pequeña.
Lo llevó a su hogar, donde atiende a los perritos rescatados, y con la ayuda de otro rescatista empezaron a revisarlo detenidamente.
Descubrieron que tenía una patita rota y muchos golpes que le estaban haciendo sufrir demasiado
Una vez que curó sus heridas y su lesión, lo rehabilitó, lo bañó, lo alimentó y lo cuidó.
Hasta que finalmente el perrito resultó ser el cachorro más dulce y tierno que haya visto jamás.
Al ver que era un caso en el que una mano monstruosa estuvo detrás, quiso grabar cada instante del impactante rescate para que quedara constancia del brutal hecho.
El joven quiso difundir el video porque está consciente que las maldades deben viralizarse para crear conciencia.
Y vaya que lo logró, las escenas tienen 8 millones de reproducciones y ha dejado a muchos con el corazón destrozado:
Por la música de fondo no se aprecia del todo el sufrimiento del perro, pero es evidente que durante toda su convalecencia el perrito gritaba de dolor.
Algunos internautas han criticado que no se hayan apresurado a hacer algo por el perro antes y que se hayan quedado sólo grabando. Además, otros consideran que los primeros auxilios que recibió el perrito no fueron los más adecuados. Pero ciertamente, muchos son buenos para criticar.
Este joven, en medio de su pobreza y sus recursos limitados, hizo lo que pudo. Y lo que importa es que al final del video, se ve al perrito más gordito, con su patita recuperada, y sobre todo lleno de amor.
No te vayas sin compartir este impresionante rescate que refleja la dulzura más increíble de un cachorrito, en contraste con el corazón más oscuro, podrido y cruel de un humano que quiso acabar con su vida de la peor forma.