No podemos negar que los perritos son de los animalitos más fieles y protectores, ellos siempre querrán actuar como ángeles guardianes con quienes crean vínculos inseparables.
Rocky y Diogee son dos perritos que desde el momento que comprendieron que su madre humana Jess Cristoffers estaba embarazada, crearon una especie de obsesión donde siempre y sin importar las circunstancias están a su lado.
Rocky es una mezcla de Dalmata que se ha vuelto inseparable a su madre.
Jess comenta que ambos disfrutan descansar sobre su vientre la mayor parte de tiempo, es como si los perritos ya estuvieran creando un nuevo vínculo con el pequeño ser que llegará para completar la familia.
Sin embargo, Rocky parece estar más apegado a esta nueva etapa de cambios donde a medida que crece la barriguita el adorable peludito se va sintiendo más cómodo descansando sobre ella.
En el último mes los dos perritos han estado más unidos a Jess.
Rocky no lleva mucho tiempo en la casa, fue adoptado recientemente para que se convirtiera en el mejor amigo de Diogee, de esta manera se mantendría ocupado y no se sentiría solo cuando el nuevo bebé naciera.
Pero en lugar de ser un gran compañero para Diogee, se unió con mayor fuerza a Jess observándola y protegiéndola todo el día. Al respecto Jess comenta:
Ambos están constantemente unidos a mí. Diogee solía saludar a mi novio en la puerta, pero ahora se sienta y se queda conmigo”.
Es bien sabido que los perritos tienen un instinto para detectar los cambios en la química del cuerpo de sus dueños, en el caso de Jess, un aumento de los niveles hormonales debido a su embarazo.
También son hábiles para detectar el cambio de ánimo de su madre lo cual los hace mucho más protectores. Tal como Diogee y Rocky que están en total sintonía con los cambios de su madre y actúan como un escuadrón de seguridad sin dejarla sola ni un momento.
Los perritos solo dejan de actuar como guardianes cuando su madre está en el trabajo.
Estos peluditos parece que han asumido roles muy marcados, mientras Rocky descansa todo el tiempo sobre la barriguita de su madre, Diogee vigila la casa de tal manera que hace que acercarse por la ventana sea todo un reto.
La pareja está feliz y preparando todo para la llegada del bebé, los perritos por su parte, están curiosos de conocer al nuevo hermanito.
Jess es amante de los peluditos y trabaja en una guardería para perros.
Aunque Cristoffers sabe que puede que necesite un poco de espacio personal después del parto, también está consciente que Diogee y Rocky serán los mejores guardianes para el pequeño ser que viene en camino.
No dejes de compartir esta tierna historia en tus redes y hagamos posible que cada rincón del mundo conozca a dos adorables peluditos que protegen a su persona favorita sobre todas las cosas.