Las ocurrencias de nuestros amigos peludos son muy adorables, especialmente cuando se trata de recrearse, ellos siempre encuentran la manera de pasarla muy bien.
Pero en ocasiones se meten en algún divertido problema y necesitan de la ayuda de un ángel humano para continuar con el juego.
Claire Cummings, se convirtió en el ángel de un cachorro que miraba detrás de la reja de su casa a su amigo cerdito de peluche tirado en la acera.
Afortunadamente, nadie se llevó al cerdito. Cuando Claire iba de camino a visitar a una amiga notó que había un objeto tirado en la acera, pensó que se trataba de algo extraño y le llamó la atención.
Fue entonces cuando miró por el espejo retrovisor mientras conducía para ver si podía identificar el objeto, y se dio cuenta de que había un perrito inclinado sobre una pared tratando desesperadamente de recuperar su cerdo de peluche.
Era evidente que se trataba de un juguete del cachorro, quien de alguna manera lo había lanzado y había caído del otro lado de la pared.
Claire dijo que no sabía cuánto tiempo había estado el pobre perrito ahí esperando que alguien viniera y se diera cuenta que necesitaba ayuda para recuperar a su amigo.
«Podría haber saltado fácilmente sobre el muro en el que se apoyaba, pero obviamente ha sido entrenado muy bien para no salir”, dijo Claire.
Claire siempre ha tenido debilidad por los animales. Ella y su pareja tienen una compañía de paseadores de perros, así que cuando se dio cuenta de lo que estaba sucediendo inmediatamente supo qué debía hacer.
Ella dio la vuelta con el auto, se detuvo y se acercó al desesperado perro para ayudarlo a recuperar a su juguete favorito.
«Somos grandes amantes de los animales y nos hubiese entristecido saber que este cachorro podría haber estado ahí durante horas esperando y sin que nadie lo ayudara», dijo Claire.
Tan pronto como el cachorro volvió a tener el juguete en su poder saltó de emoción. Su felicidad era visible e incluso aceptó un poco de atención y cariño como agradecimiento.
El adorable amigo peludo se quedó mirando a Claire cuando regresaba al auto, y cuando ella se alejó, miró hacia atrás y notó que ya se había ido.
Ya había recuperado a su juguete y alegremente había vuelto a entrar. Claire estaba encantada de haber podido ayudar al adorable cachorro.
Celebremos que existen personas como Claire con un corazón lleno de empatía y amor hacia los animales. Comparte este tierno gesto de solidaridad.