Enfrentar el triste final de nuestros animalitos no es fácil, mucho menos si son víctimas de tratos injustos a manos de personas insensibles.
Desafortunadamente, cada día muchos perritos y gatos mueren de la peor manera sin recibir la justicia que se merecen, dejando a sus torturadores libres o pagando condenas simbólicas que no causan ningún efecto en la mente de estas personas.
Este incidente ocurrió en el 2016 pero el vídeo se hizo público a finales del 2019.
Roberto Hernández es un joven que logró evadir los cargos de crueldad animal tras prenderle fuego a un gatito. El incidente ocurrió en el suroeste de Miami cuando el acusado solo tenía 17 años de edad.
Todo fue grabado por las cámaras de seguridad de una vecina, en las imágenes se logra ver al joven prenderle fuego a un gatito que se encontraba encerrado en una jaula. Poco después le dio el cuerpo a sus pitbulls para que se lo comieran.
Los hechos ocurrieron en la casa de la abuela del joven cuadra 16600 de SW 174th Avenue de Miami.
En el 2017 cuando Hernández cumplió la mayoría de edad las autoridades le imputaron un cargo de crueldad animal que para muchos activistas no corresponde con la magnitud del delito.
Marlene Gonzáles es la propietaria de la cámara que evidenció el crimen. Al respecto comenta:
El gato se veía saltando y sufriendo un dolor extremo buscando escapar de la jaula. Fue sacado en agonía mientras seguía en llamas. El acusado miraba todo el incidente hasta que el gato parecía muerto”.
Los abogados defensores de Hernández argumentan que el joven ha tenido una infancia problemática, a su vez destacan que en el vídeo no se puede distinguir el animal.
La abuela de Hernández dijo en una entrevista realizada por medios locales que no se trataba de un gato sino de un mapache que ponía en riesgo los demás animales de la finca. Hernández recibió una condena de 100 horas de servicio comunitario y cinco años de libertad condicional.
La policía encontró herramientas de pelea de gallos en el trabajo de Hernández.
Desafortunadamente, los casos de abuso en contra de nuestros animalitos exceden los números que cualquier amante de los animales podría tolerar.
Isabel Zapata es residente de Miami-Dade, comenta que a pesar de que este tipo de casos son pocos comunes no son nada nuevo. Señala que si bien hay grupos de rescate tratando de hacer lo posible y buscar justicia, al final nadie hace nada.
Durante más de 10 años Isabel ha visto los peores tratos en contra de los animalitos.
No es justo que nuestros animales sigan padeciendo la barbarie de personas insensatas.
El morbo de algunos por ver sufrir a seres indefensos debe ser penado con todo el peso de la ley. No es suficiente solo cumplir algunas horas servicio comunitario. La vida de nuestros animalitos vale tanto como la de cualquier otro ser vivo.
Por favor, ayúdanos a compartir este caso en tus redes y sigamos exigiendo más leyes para proteger a los animales. Ellos solo cuentan con nosotros no los abandonemos y alcemos la voz en contra de los tratos injustos.