En medio del estrés en el que se vive actualmente, es común que en algunas actividades diarias existan distractores que afecten la concentración. Por muy simples que parezcan las tareas que hacemos, a veces un error puede causar un resultado desfavorable.
Tal como le ocurrió a este hombre cuando llevó a su mascota a la peluquería, algo sencillo, pero que para él representó un gran desafío.
Recientemente, Rudy Salazar debía recoger a su perro en el salón de belleza canina donde lo había dejado su esposa, Coco.
Se trata de un cachorro blanco llamado BooBear.
Rudy con toda la intención, se dirigió al lugar a cumplir su misión y eso fue lo que hizo, sin embargo, el resultado no fue el mejor. Cuando llegó a casa con el perrito en brazos, su esposa notó que algo no andaba bien, su perrito sin duda, lucía muy extraño.
El corte de pelo que le había pedido que le hicieran a BooBear no solo había cambiado su apariencia sino la esencia completa del perrito que llena de alegría la casa.
Un pequeño cachorro «impostor» que fue sacado de la peluquería.
Tras verlo detalladamente, Coco, confirmó que en realidad había una buena razón para pensar que todo estaba diferente. Su esposo había tomado al perrito equivocado.
Rudy comenta que cuando llegó a la peluquería dijo que iba en nombre de Coco para llevarse al perrito. Pero hubo un gran malentendido, en lugar de entregarle a Boobear, le entregaron otro perrito al que también dejaron con el nombre de Coco.
Ambos perritos tienen características muy similares.
El padre sin darse cuenta del error, tomó al perrito entre sus brazos y se marchó a casa, no fue sino hasta que su esposa le advirtió que se dio cuenta de la confusión. El padre sorprendido pero muy risueño no podía creer lo que estaba pasando.
Por suerte, la pareja al darse cuenta del error decidieron enmendar las cosas, devolvieron al perrito a la peluquería y se aseguraron de regresar a casa con el perrito correcto.
El perrito estaba muy confundido.
Dog named Coco aka wrong dog
Publicada por CoCo Salazar en Jueves, 26 de diciembre de 2019
Ante esta situación es muy difícil culpar a alguien, tanto BooBear como su compañero de peluquería canina al que llamaron Coco, tienen características muy similares.
Ambos blancos y esponjosos pasaron como desapercibidos ante los ojos de un padre un poco distraído. Al respecto Coco, la esposa de Rudy comenta:
Tengo al mejor esposo de todos”
La escena sin duda, resultó graciosa para la familia quienes luego pudieron recuperar a su perrito, quien por suerte regresó con el mismo entusiasmo y amor que cuando lo dejaron en la peluquería.
El hecho afortunadamente terminó siendo una divertida anécdota, pero sirvió como advertencia para que en estos lugares adopten las medidas de seguridad necesarias para prevenir cualquier error en la identificación y entrega de los perros.
No te vayas sin compartir esta insólita situación que convirtió a este perro y a su dueño en celebridades en las redes.