El trato indigno hacia los animales existe en casi todos los aspectos de nuestra vida cotidiana, aunque hay casos que levantan más ira y animan incluso a las personas más moderadas a pedir un cambio y leyes más justas para protegerlos.
Vivimos en una sociedad donde se trata con violencia a seres indefensos que no lo merecen, por negligencia, falta de empatía y a veces incluso por diversión. Resulta espeluznante pensar que, en estos momentos, algún animalito está siendo víctima de alguna acción malsana del ser humano.
Un pobre perrito se encontraba tirado, yaciendo a un costado de la carretera, inerte y al borde de la muerte. Su collar estaba enredado en las ramas, su cuerpo presentaba varias heridas graves y estaba condenado a esperar su triste final, hasta que un héroe apareció en su camino.
Pasó mucho tiempo postrado en esta difícil situación y sus heridas comenzaron a llenarse de gusanos, pero justo cuando parecía que el sufrido animalito iba a darse por vencido, el increíble personal de la Fundación Feed Friends y, puntualmente Alex, uno de sus ángeles, lo liberó tras recibir una llamada urgente.
El perrito se encontraba en pésimas condiciones, estaba demacrado, herido y desnutrido.
“No sabemos cuánto tiempo debe haber estado atrapado allí, pero por la mirada desesperada en sus ojos y la terrible forma en que estaba, sabíamos que debía haber pasado un tiempo, pero por supuesto que no íbamos a dejarlo solo. El increíble equipo lo liberó y lo llevamos al veterinario de inmediato”, comentó el hombre
La forma y las condiciones en las que se llevó a cabo el rescate marcaron de tal manera a Álex, que decidió bautizar al perrito con su nombre. Luego de su nuevo bautismo, ahora Álex cachorro comenzó su proceso de recuperación.
“Álex estaba tan cansado, hambriento y sediento… Se deshidrató y tuvo una herida desagradable con gusanos. Sabíamos que tendríamos que encontrarle el mejor hogar posible para que pudiera tener una buena oportunidad de recuperarse”, señaló el rescatista.
Afortunadamente, su gran espíritu de lucha lo ayudó a incorporarse poco a poco, a interactuar con otros perros y gatos, y pronto comenzó a verse mucho mejor y más animado, luego de haber vivido quién sabe por cuánto tiempo en esa traumática condición.
Una vez que ya estuvo sano, tras hacer nuevos amigos, lindas amistades y recuperar la confianza, emprendió su viaje hacia un hogar lleno del amor y el cariño que otro u otros le negaron. Hoy es un perrito feliz y enamorado de su nueva familia adoptiva.
Cuanto más sabemos de los animales no humanos, más dudas e incertidumbres se nos amontonan cuando revisamos de nuevo nuestro cómodo, simplista y falso esquema del mundo: ¿qué derecho tenemos los humanos a disponer de las vidas de otros animales?
Alex jr. hoy disfruta de un verdadero hogar al lado de Alex su ángel guardián
¿Acaso no tienen ellos derecho a vivir por sí mismos, sin necesidad de el necio determinismo con que juzgamos y administramos sus vidas? Nos adentramos en un terreno pantanoso y que, sin duda, vivirá grandes cambios en los próximos años, cuando los derechos de los animales vayan siendo reconocidos de manera seria y la sociedad y la justicia actúen en consecuencia.
Comparte esta historia con tus seres queridos y amistades y haz todo lo que esté en tus manos para evitar este tipo de casos. No olvides que, tomando decisiones responsables podemos, casi sin esfuerzo, contribuir a un cambio social donde las vidas de los animales sean consideradas con el respeto que merecen.