La contaminación ambiental representa un peligro para la salud de los seres vivos. La principal consecuencia que acarrea es el calentamiento global, y los animales no escapan de los efectos terribles que ello implica. Unas fotos dejaron la evidencia del riesgo que corren dos oseznos polares en Alaska, intentando comer desechos de plástico.
Danny Sullivan, un fotógrafo de 58 años de Los Ángeles, Estados Unidos, que se encontraba en Kaktovik, Alaska, presenció una dolorosa escena donde dos ositos polares intentaban comer un pedazo de plástico.
Sullivan captó el momento en el que los animalitos lidiaban por quedarse con el plástico; cada uno tiraba de un extremo del objeto que habían encontrado flotando en el agua con restos de basura, como bolsas y botellas.
Los desechos de plástico no llegan a las playas y ríos por sí solos, son los seres humanos que irresponsablemente se deshacen de ellos en cualquier lugar, terminando en lugares donde causan mucho daño.También se ve mucha basura alrededor de la arena donde están los dos animales.
Cada uno de los oseznos quería quedarse con un trozo de lo que pensaban era comida
La pareja sostiene que de no ser por el calentamiento global toda el área habría estado helada, y la contaminación afectaría de diferente forma, ya que el plástico habría estado enterrado y no flotando en el mar, o rodando por las arenas de la playa.
«Ha hecho unos cinco grados más de lo que debería, por lo que el hielo empezó a formarse a final de mes, y no al principio. Algo que acorta el periodo de caza para los osos polares, y que no tardará en tener repercusiones», explicó el fotógrafo.
A pesar de la preocupación del hombre, y de su esposa Shayne McGuire, que estaba acompañándolo, nada pudieron hacer por evitar que los oseznos dejaran de intentar comer el plástico.
«Si hubiéramos tratado de frenarles, su mamá osa habría intervenido. Y, créeme, no nos habría tomado como prisioneros a la hora de proteger a sus oseznos. Tratamos de limpiar toda la basura y el plástico que vemos, pero no siempre es posible, no puedes ponerte en peligro», aseguró el preocupado fotógrafo.
Sullivan teme con resignación que los hermosos animales hayan podido ingerir el dañino material. Pero tiene la esperanza de que este tipo de publicaciones contribuya a crear conciencia en las personas, en cuanto a la necesidad de accionar ante cosas como estas. Debemos dejar de contaminar indiscriminadamente nuestro hermoso planeta azul.
“Espero que la gente cuando vea estas imágenes piense que tenemos que actuar ya”, instó el hombre.
Las fotografías de Sullivan se han viralizado y se convierten en una gran evidencia de los efectos perniciosos de la contaminación y el cambio climático.
Esperemos que los ositos estén bien. Es importante seguir reforzando las campañas de concientización sobre la contaminación ambiental para evitar daños mayores. La especie humana debemos aprender a convivir en armonía y respeto por la vida de todos los seres vivos que habitan nuestra madre tierra.
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