En ocasiones creemos que no podemos hacer nada para ayudar a tantos animalitos necesitados pero ¡qué equivocados estamos! Con cosas tan sencillas podemos cambiarle el día a cientos de perritos y gatitos callejeros y un gran ejemplo de esto nos lo ha dado Ahmet Selki.
Este hombre nos ha enseñado que el agua no sólo es vida sino una gran fuente de amor y solidaridad.
Ahmet sabía que debía hacer algo por los animales de la calle pero su idea aunque sencilla ha sido realmente poderosa pues también está ayudando a inspirar a otros. Este turco colocó agua en un tazón para calmar la sed de tantas criaturas despavoridas que vagan por su ciudad.
Pero este no era un tazón común, sino que en su interior contenía una cámara y con ella ha logrado registrar momentos realmente tiernos mientras las criaturitas calman su sed.
Para Selki lo importante era que los animalitos pudiesen encontrar un poco de agua para calmar su sed, pues dentro de la ciudad esto es algo casi imposible para ellos.
En ocasiones estos seres recurren a fuentes de aguas negras y contaminadas pero ante sus inocentes perspectivas sólo es un poco de aguan, sin importar los peligros a los que se exponen.
«No tienen la oportunidad de encontrar un río limpio en la ciudad, o un lago o cualquier otra fuente de agua natural. Por lo tanto, es nuestro deber proporcionar agua dulce, tanto durante el verano como en otras estaciones», dijo Selki.
Él solía dejar el tazón pero pocas veces veía que los animales tomarán, así que pocas veces podía conocer a sus invitados. Pero el día en que colocó la cámara todo cambió porque no sólo le dio un rostro a sus bebedores sino que él mismo recibió una gran dosis de amor.
Sólo mira el vídeo, el resultado es realmente tierno.
Además, este hombre descubrió que no sólo estaba ayudando a los gatos y perritos como el pensó, sino que incluso las aves se animaban a beber del tazón.
«Los resultados fueron sorprendentes. No sólo se trataba de gatos y perros, sino también de un cuervo y mariposas para tomar una copa», dijo Selki.
La iniciativa de este amable hombre nos demuestra que por muy poco que nosotros pensemos sea el gesto, realmente puede resultar de gran valor para ellos. Especialmente para aquellos que teniendo toda una vida en la calle y que pocas veces reciben algo de amor.
Por favor comparte esta historia y haz posible que este divertido experimento ayude a inspirar a otros ¡Qué hermoso sería ver nuestras ciudades llenas de tazones de agua y comida libre para ellos!