Las lluvias y los fuertes vientos del huracán Dorian golpearon no solo a cientos de personas, sino que puso en una difícil situación a los más vulnerables, nuestros adorables animalitos. En medio de la crisis muchas personas estuvieron alerta y se desplazaron a lugares más seguros, pero las personas no son las únicas que buscaban protección.
Muchos animalitos se desplazaron buscando refugio.
Los animalitos se ven obligados a salir de su hábitat y buscar algún lugar que sirva de refugio o escondite mientras la tormenta pasa. Patrick Smith, se estaba preparando para el huracán, decidió tocar las campanas de viento de la esquina de su casa y notó que no sonaban igual, se dispuso a revisarla volteando uno de los tubos de metal, para su sorpresa un pequeño animalito había encontrado el refugio perfecto.
La rana arbórea es un género de anfibios del que se conocen 35 especies.
Se trataba de una rana arbórea, pero no era la única que había encontrado un escondite, cuando Smith revisó toda la campana notó que en cada tubo se encontraba una pequeña rana dejándolo totalmente sorprendido. El hombre señala que a este tipo de animalitos les gusta dormir durante el día en las campanas porque las cubre de sol, pero esta vez fue diferente, comenta que nunca había visto tantas ranas a la vez dentro de la campana de viento.
Se conocen por la forma en disco de sus dedos.
Smith explica que los pequeños animalitos usan sus patas adhesivas para subir por las paredes de la casa hasta llegar a la campana de viento que cuelgan a diez pies del suelo. Por el gran número de animalitos que estaba escondido sabía que huían del huracán, no podía dejarlas afuera sin protección así que las liberó en su patio trasero donde podían refugiarse de la lluvia y el viento.
Su tamaño varía de 1 centímetro a 10 centímetros de longitud.
So I went to put away my wind chimes for #HurricaneDorian, and…
????? pic.twitter.com/I80tQW1UNZ
— Florida Wolfman (Mac) ?️? (@PooltoyWolf) September 3, 2019
Todas las ranas se escondieron en las palmeras detrás del estanque de la casa de Smith, pasaron lo peor de la tormenta sin arriesgar su vida en un lugar seco y seguro. Su increíble acto de bondad salvó a estos pequeños animalitos que son tan vitales para nuestra fauna.
Las almohadillas de sus dedos y patas largas les ayudan a escalar y saltar.
Cientos de personas no dejan de comentar sobre este pequeño gesto que hace la diferencia. Ante la difícil situación muchas personas solo piensan en su protección olvidando que los animalitos también buscan refugio, gracias a Smith las ranitas pudieron sobrevivir, solo es cuestión de tiempo para que vuelvan a su hábitat.
Comparte esta increíble historia y anímate a apoyar a todas las víctimas del huracán, sobre todo a nuestros indefensos animalitos que tanto nos necesitan en situaciones del alto riesgo.