A nadie puede quedarle alguna duda de que los perros además de fieles son criaturas bastante inteligentes. De esto está bastante segura Rachel Silverstein, la dueña de una hermosa perrita salchicha que pasa los días haciendo miles de travesuras.
En esta ocasión, Rachel ha comentado o advertido en las redes sobre la verdadera personalidad de su perrita Teckel, Freida.
Rachel y su amiga fiel van juntas a todas partes, incluso salen a caminar, visitan restaurantes o entran al agua a nadar.
Un buen día algo muy extraño sucedió con Freida, la perrita no aparecía y Rachel casi colapsó de los nervios. Silverstein perdió de vista a su amiga mientras estaba en su casa, algo que no era extraño, pero cuando la llamó por su nombre el animalito no respondió.
«Pasé unos buenos cinco minutos caminando por la casa gritando en busca de Freida», dijo Rachel Silverstein.
Aunque fue por un corto tiempo que estuvo perdida, para Rachel fueron minutos interminables.
La mujer realmente se puso nerviosa. Freida no había salido de la casa así que decidió revisar cada habitación de la casa. La respuesta del paradero estaba en un lugar peculiar y propio de la perrita, su cubo de juguetes.
«[Ella] estaba en su cubo de juguetes. Mirándome mientras la buscaba», dijo Silverstein.
La perrita había aprovechado su singular aspecto para camuflarse entre el canasto en el que habían algunos peluches y juguetes de su tamaño.
La astuta Freida sólo estaba jugándole una broma a su madre, así que Rachel no tuvo otra opción que reírse de la inesperada travesura.
Desde que este hecho ocurrió, a esta amiguita se le ha hecho costumbre refugiarse en su nuevo escondite. Por suerte para los nervios de su dueña, ya no tiene nada que temer porque es fácil encontrarla y en el lugar no corre ningún tipo de peligro.
Esconderse es una de las actividades preferidas de Freida pero esperamos no cambie pronto de escondite y le dé otro susto a su madre.
«Ella se esconderá y dejará que la busque. Por lo general, está en su tipi o en la lavandería o debajo de la cama», dijo Silverstein.
Después del susto, Rachel ha tomado diversas fotografías de la perrita escondiéndose. Ella sabía que su amiga era astuta pero en esa ocasión aumentó de nivel. Anteriormente, Freida era una perra de terapia para niños en el sistema de cuidado de crianza. Así que no podemos dudar que tiene una personalidad bastante especial.
¿Qué tal el ocurrido escondite de esta traviesa cachorra? Comparte esta nota y advierte a tus amigos, a veces ellos se esconden en los lugares más sorprendentes.