No es por casualidad que muchas personas consideren a sus mascotas parte de la familia, especialmente los perritos con quienes se estrechan lazos de afinidad fuertes y duraderos, el amor que se recibe de ellos es inmenso. Tal es el caso de Prince, el hermano peludo de la pequeña Halle, quien cariñosamente cuida y vigila sus sueños.
Todo comenzó cuando Sara Lebwohl y su querido esposo Zach decidieron formar una linda familia, lo primero que hicieron fue llevar a casa a un perrito de abundante pelaje a quien pusieron por nombre Prince.
Prince es el mejor niñero
Pero esta alegre familia de tres miembros quiso crecer, y pronto llegó al hogar una preciosa bebecita que trajo mucha felicidad a todos. Desde el primer momento el peludo animalito y su hermanita se conectaron como por arte de magia, y de inmediato se convirtieron en los mejores y más grandes amigos.
«Cuando ella llegó por primera vez a casa, él se acercó a ella y la olió, él sabía que ella era pequeña y frágil. Pero siempre se mantuvo cerca y la vigilaba, fue realmente un perro niñera desde el primer día”, dijo la feliz Sara
A Prince le encantaba estar siempre cerquita de la niña, jugaban y se divertían siempre juntos, pero también cuidaba muy bien de ella, le gustaba asegurarse de que estaba bien y segura.
En el video podemos ver cómo este peludito cuida a la pequeña angelita
Cuando la tierna Halle empezó a crecer, sus padres la pasaron a su propia habitación, y en las noches estaban pendientes de levantarse para ir a verla cuando sentían que estaba algo intranquila o lloraba.
Dejaban la puerta semiabierta para que su hermano perruno pudiera entrar y hacerle compañía en las noches. Así que cuando la niña no puede dormir él está allí hasta que ella logra conciliar el sueño.
«Le abrimos la puerta cuando él se levanta, y entra para saludarla. Tiene una pequeña rutina, incluso rueda por el suelo. La observa y se acuesta, lo sorprendente es que esto la calma, y la bebé vuelve a dormirse», comentó la madre.
La pareja está contenta de que Prince sea tan buen hermano, ahora pueden descansar un poco más sin preocuparse porque el amoroso animalito cuida de la nena.
“Prince ha sido un salvador inesperado, permitiéndonos un poco más de horas de sueño. Cuando él entra en la habitación, sabemos que está en buenas manos y que todos podemos descansar un poco más”, afirmó Sara.
Es admirable cuanto amor puede transmitir este tierno animal, la familia se siente cada vez más unida, contenta y segura, ¿Cómo no quererlo?
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