Todos sabemos que los niños comienzan a ver las cosas que le rodean a la luz de los ojos de sus progenitores, el estrecho vínculo que nace y se va consolidando entre ambos, contribuirá a moldear el desarrollo emocional del hijo. Lo que no sabíamos era que algunas investigaciones sugieren que lo mismo puede ocurrir en el caso de los gatos y sus humanos.
Existen estudios científicos serios sobre este tema, como el desarrollado por Lauren Finka. Investigadora postdoctoral en bienestar animal en la Escuela de Ciencias Animales, Rurales y Ambientales de la Universidad de Lincoln, y el profesor Daniel Mills, profesor de Medicina del Comportamiento Veterinario en la Universidad de Lincoln.
En él, se utilizaron pruebas de personalidad en 3.300 dueños de gatos y se hizo un análisis psicológico de cada uno a través de preguntas que se conocieron como “Big Five”.
En cada una se buscaba determinar la personalidad de quien la respondía atendiendo a factores claves como: qué tan agradable, neurótica, abierta a nuevas experiencias, o extrovertida es la persona.
Los resultados indicaron que los humanos que tienen inclinación a ser neuróticos, suelen tener gatos más ansiosos y agresivos. Así que, si no te agrada mucho algún aspecto de la personalidad de tu minino, es posible que él solo esté adoptando tu manera de ser, tal y como hace un niño con su padre.
Otra investigación la llevó a cabo la Universidad de Viena, dirigida por Kurt Kotrschal de la Estación de Investigación Konrad Lorenz. Se registró y analizaron las interacciones diarias entre 41 felinos y sus humanos.
El estudio concluyó que estas relaciones son muy parecidas a las de los humanos, es decir los gatos y sus dueños se influencian mutuamente, y cada uno de ellos controla a menudo los comportamientos del otro.
Si eres juguetón y cariñoso con tu gato, tu mascota lo será contigo
En la Universidad de Sofía en Tokio, Japón, Atsuko Saito realizó una investigación para conocer si los gatos reconocían o no cuando se les llamaba por su nombre, los resultados fueron positivos y se publicaron en la revista Scientific Reports.
«Sí, los gatos entienden las palabras, saben su nombre y, sabiendo que los llamas no van porque no tienen ganas, porque la mayoría de gatos no desarrolla un alto apego hacia su amo», expresó el científico.
Giuseppe Piccione y sus colegas de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Messina realizaron un estudio sobre gatos y concluyeron que los hábitos de alimentación, actividad y patrones de sueño de los felinos eran similares al de sus humanos.
Un estudio realizado por Marieke Cassia Gartner y Alexander Weiss, de la Universidad de Edimburgo fue publicado en Applied Animal Behavior Science, y se basó en el análisis de la personalidad de los gatos atendiendo rasgos como: arrogante, social, tímido, confiado, agresivo, tranquilo, tímido, excitable, dominante y curioso. Se determinó que los humanos sirven como modelos para sus gatos.
Todos los estudios realizados convergen en un punto en común: los gatos son el reflejo de la personalidad de sus humanos.
A todo esto, un sorprendido cibernauta expresó su preocupación en las redes sociales:
“Mi gata engaña a su novio gato con otros del barrio, voy a tener que hablar seriamente con mi mujer”, escribió el divertido usuario.
Ahora que sabemos más sobre la influencia que tenemos sobre nuestros tiernos gatitos, debemos darles mucho amor y cuidarlos más que nunca.
Comparte este insólita historia con todos tus amigos, y disfruta de tu peludo felino.