Un gran acontecimiento ocurrió en Macon-Bibb County Animal Welfare, se trata de Betty, una linda perrita marrón que vivió durante casi cuatro largos años en ese refugio y no había conseguido quien la adoptara.
Todos los trabajadores del refugio la amaban pero deseaban que consiguiera un hogar, una familia que cuidara de ella y con quienes pudiera ser más feliz.
Hacía casi cuatro años que llegó Betty a ese refugio para perritos de Georgia después de haber tenido una pelea con algunos perros callejeros.
De acuerdo a las leyes del estado de Georgia, en los Estados Unidos, cuando un perrito es llevado por peleas callejeras con otros se considera que pertenecen a las personas quienes lo rescataron, y solamente un tribunal puede tomar una decisión al respecto.
Para poder ubicar un nuevo hogar para estos animalitos debe esperarse hasta que estos se consideren que están legalmente perdidos. Pero el tiempo iba pasando y Betty no conseguía un hogar, las esperanzas empezaban a perderse.
Su caso no iba bien en los tribunales pero de pronto, para fortuna de la hermosa y juguetona perrita, su suerte cambió.
Una nueva norma legal entró en vigencia y la favoreció. Según esta, si el dueño de un perro no es capaz de cubrir los gastos del refugio, el animalito podía ser dado en adopción.
Esta fue una excelente noticia para Betty y todos los que la amaban en Macon-Bibb County Animal Welfare. La esperanza volvió a nacer y sólo era cuestión de darle más de tiempo. De esa forma, Betty pasó a pertenecer formalmente al refugio y ahora sí, era el momento indicado para buscarle su tan ansiado hogar.
After 3 and a half long years, our Betty is free! A huge thank you to the Animal Enforcement Team, Animal Welfare Staff, County Attorneys Office, and all of our followers. Also thank you to Pixel Fund in Georgia for making this possible. Everybody don’t forget we still need to get Tom and Sugar into their Furever Families!!!
Publicada por Bibb County Sheriff's Office Animal Services en Jueves, 7 de febrero de 2019
La historia de la linda Betty se regó como pólvora en las redes. Los comentarios en Facebook estallaron con palabras de emoción y alegría por la perrita. Gracias a esto, Betty encontró una amorosa familia que quería adoptarla.
El día que fueron sus nuevos humanos al refugio a buscarla, fue muy emocionante. Dos de las chicas que la cuidaban le hicieron un letrero donde se leía: Betty, finalmente libre.
Los trabajadores del albergue bailaban de alegría por la suerte de la perrita y también había lágrimas en sus ojos porque la querían mucho y ya no la tendrían con ellos.
Todos la abrazaban y besaban, ella se movía de un lugar a otro, se le veía muy contenta, su cola lo demostraba en extremo. Cuando iba saliendo del lugar, la confundida Betty se frenó de golpe en la puerta, tal vez en su corazoncito canino había la sensación de que no volvería a ver a los amigos que la cuidaron y quisieron tanto.
Pero, afuera ya la esperaba el auto de su nueva familia con las puertas abiertas para llevarla rumbo a su nuevo hogar. Casi cuatro años de espera, pero valió la pena. Betty es una perrita dulce y tierna que llenará de amor incondicional a la afortunada familia que la acogió. Nuestros mejores deseos están con ella.
¡Comparte esta emotiva historia con todos tus amigos y fomentemos la adopción animal!