Dean Nicholson decidió cambiar radicalmente su vida cuando abandonó Dunbar, su ciudad natal en Escocia, para recorrer buena parte del mundo en una bicicleta. Cansado de trabajar como un soldador, recorrió más de 200 kilómetros hasta Newcastle, donde se embarcó hacia Amsterdam.
Una vez en tierra firme comenzó su increíble recorrido. Pasó a Bélgica, viajó por parte de Francia, Suiza y llegó a Italia, donde tomó un ferry que lo llevó a la costa de Croacia. Dean atravesó parte del continente europeo con su bicicleta en un año, sin imaginar que su vida estaba a punto de dar un vuelco.
Dean tiene más de un año viajando en bicicleta.
Viajó desde Croacia a Bosnia, donde conocería a alguien muy especial. Se encontraba en una región montañosa, subiendo una cuesta con su bicicleta y oyendo música en sus audífonos, cuando de pronto escuchó un maullido.
Al darse la vuelta, Dean se dio cuenta de que no viajaba solo. Una gatita flaca y sumamente pequeña iba detrás de él. Maullaba con fuerza, gracias a eso pudo escucharla. Se detuvo, le hizo algo de cariño y no pudo sacarse a la pequeña de encima, ella se propuso seguirlo.
Nala fue vacunada, tiene microchip y pasaporte.
Al principio, Dean pensó que podía tenerla de compañera de viaje el tiempo que anduviera de paso por Bosnia, pero no tardó en descubrir que sería difícil deshacerse de ella. No solo porque ella estaba decidida a quedarse a su lado, sino porque él también se había encariñado demasiado con la pequeña, a quien llamó Nala.
Dean quiso hacer las cosas bien, así que llevó a Nala al veterinario, donde la consiguieron bastante bien de salud, salvo por su desnutrición. La gatita fue vacunada y obtuvo un pasaporte, que le permitía seguir viajando por el territorio europeo con su nuevo amo.
Entonces Dean tuvo que adaptar su bicicleta para que Nala viajara cómoda con él. Una cesta en la parte delantera del vehículo se convirtió en el asiento oficial de la gatita para este largo viaje.
Estos amigos inseparables tienen ya más de tres meses recorriendo la parte sur de Europa y han pasado por Montenegro, Albania y Grecia, donde se encuentran en la actualidad.
Nala tiene su propio lugar donde viajar
Dean es un hombre de escasos recursos, que además viaja ligero de equipaje, así que a través de su cuenta de Instagram ha dado a conocer su aventura junto a Nala, conquistando el corazón de miles.
Los turistas que lo ven pasar en su bicicleta con esta inusual compañera se detienen a su paso, pidiendo fotos con esta viajera de cuatro patas y reseñando su historia. Esto le permitió crear una cuenta de Go Fund Me, para conseguir fondos para los gastos médicos de Nala.
Dean rescató a Balou en Albania.
Dean también recoge la basura de las playas mientras permanece en ellas y en Albania salvó la vida de un cachorro al que llamó Balou. Quiso convertirlo también en su compañero de viaje, pero al complicársele las cosas, lo dejó al cuidado de un veterinario.
Una familia en Londres supo de la existencia de Balou por las redes sociales de Dean y se propuso adoptar a este cachorro, que muy pronto y gracias a los viajeros más inusuales que te puedas imaginar, se reunirá con su familia para siempre.
Nala y Dean no se detienen en su aventura
Dean y Nala siguen recorriendo mundo, ganando nuevos amigos a cada paso y arrastrando cada vez más la atención de las personas en las redes sociales y fuera de ellas.
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