Todos los dueños de mascotas saben que deben armarse de paciencia cuando llega la hora de darles medicina a los peludos de la casa. A pesar de que existan muchos trucos para ocultar pastillas en alimentos más deliciosos, los perros aprenden con el tiempo a comer sólo la comida y regresan la pastilla unos minutos después.
Brutus debe tomar medicina porque tiene artritis.
Brutus es un hermoso rottweiler que ha conquistado las redes desde hace un tiempo con los videos que su dueño publica de él y de su hermano, otro rottweiler llamado Hank. En uno de los videos más recientes se puede ver cómo el astuto Brutus se las ingenia para no tomar las pastillas que su dueño le da una y otra vez.
“El detesta tomar sus medicinas”.
El gran rottweiler debe tomar 5 pastillas diarias. Como es de esperar, no se trata de la hora favorita del día para el dulce perro así que recurre a todo tipo de trucos para tratar de evitar tragar las píldoras.
Una vez que Brett pone la medicina en su boca, Brutus se acuesta rápidamente en el suelo para ponerse patas arriba y comienza a hacerse el fallecido sólo para que no lo obliguen a tragarlas.
“Brutus, tienes que tomar tus medicinas. Vamos, cariño”.
Brett es muy paciente y quiere a Brutus más que a nada en este mundo. Antes de tomar cualquier medida, prefiere hablar tiernamente con su perro y le promete que una vez que acceda a tomar su medicina irán a pasear y a jugar en el parque.
“Sabes que cada vez que tomas tu medicina salimos a jugar. No podrás salir hasta que las tomes. ¿Entiendes?”.
Brutus permanece totalmente inmóvil y muy concentrado en su papel de hacerse el inconsciente. Brett lo mece por unos segundos y lo toma de las patas para ver si con el movimiento logra tomar las pastillas y el gracioso perro lo mira completamente determinado a ganar esta batalla contra el feo sabor de su medicina.
“Tiene las pastillas en su lengua y no las quiere tragar”.
Después de unos minutos Brutus se cansa y traga pero se las ingenia para devolver la mayoría de las pastillas moviendo la cabeza de un lado a otro. Luego se relame una y otra vez para tratar de sacarse ese sabor que no le gusta para nada.
“Devolvió cuatro. Yo le había dado cinco”.
Brett se dispone pacientemente a volver a poner las pastillas en su hocico convencido de que tarde o temprano se resignará y las tragará. Esperamos que Brett logre darle las medicinas para que este lindo perro siga contando con mucha salud.
¿Qué opinas de los dotes de actuación del astuto Brutus? Comparte este gracioso video para alegrar el día de muchos.