La vida muchas veces nos da regalos y segundas oportunidades en situaciones críticas o peligrosas. En ocasiones, nuestra vida o la de alguien cercano puede estar en peligro sin que nosotros lo notemos, y la ayuda puede venir en formas que nos pueden sorprender. Por ejemplo, en la forma de nuestro gato.
Eso fue justo lo que le ocurrió a Janine DeMartini, una madre soltera neoyorquina que adoptó a un hermoso gato llamado Herbie, del Refugio Animal de la Esperanza de Staten Island.
El gatito estaba destinado a ser puesto a dormir; Janine le salvó la vida al sacarlo de ahí. Lo que ella jamás pensó es que él le devolvería el favor más adelante. ¡Y vaya manera de hacerlo!
Después de un día común para Janine, lleno de todo tipo de obligaciones y quehaceres (niños, trabajo, escuela, hogar), ella se dispuso a descansar en su habitación. En ese momento, Herbie se mostró muy agitado: maullaba sin parar, se subía a la cama de Janine y no paraba de intentar llamar su atención.
Al principio, Janine pensó que eran simples cosas de gatos, nada fuera de lo común que mereciera especial atención por parte de ella, además de que el cansancio la inducía a simplemente ignorar a Herbie. Sin embargo, la insistencia del gato era ciertamente anormal.
Herbie es un gato muy cariñoso y atento con todos los miembros de la familia. Le gusta jugar con todos, pero ese comportamiento ya no era normal y algo dentro de Janine le decía que siguiera a su mascota.
Una vez se levantó para ver qué quería su gato, este salió por la puerta de la habitación. Ella lo siguió y, para su sorpresa, Herbie caminó directamente hacia la habitación de su hija menor de dos años, Isabella.
«Herbie estuvo tocando la puerta con la pata. Y cuando la abrí, corrió adentro y saltó a la cuna. Isabella se había girado mientras dormía y se había enrollado su manta alrededor de la cabeza”, dijo Janine.
Pudo escuchar perfectamente los sonidos de asfixia de su hija.
Janine llegó a tiempo para rescatar a su hija de lo que hubiera sido una pérdida muy trágica. Además, Isabella no resultó con ningún tipo de lesión o secuela por la falta de oxígeno.
Todo gracias a Herbie, a quien ahora todos se refieren como lo que es, un héroe. Y que, sin duda, siempre tendrá un lugar muy especial dentro de la familia.
Hay muchas cosas que nosotros no podemos entender, como por ejemplo los sentimientos de los gatos. Pero si hay un par de cosas que no se pueden poner en duda son el cariño que Herbie y su familia han desarrollado mutuamente y que sin él la pobre Isabella ya no estaría con nosotros. Un suceso increíble que nos deja sólo agradeciendo a nuestro inesperado héroe.
¡Comparte esta grandiosa historia con todos tus amigos y muéstrales al heroico Herbie!